El déficit exterior aumenta un 63% hasta noviembre y se sitúa en 2,2 billones
En los 11 primeros meses del año 1992, el déficit de la balanza corriente (diferencia entre exportaciones e importaciones y transferencias de capital) alcanzó los 2,268 billones de pesetas, según los datos del registro de caja del Banco de España. Esta cifra es un 63,7% superior a la acumulada en el mismo periodo de 1991 (1,385 billones de pesetas). Las entradas netas de capital a largo plazo disminuyeron un 43%.
El notable aumento del déficit de la balanza corriente se debe, según el Banco de España, al deterioro del saldo comercial y a la reducción de los superávit de servicios y transferencias. Aunque la desviación fue más acusada en la primera mitad del año, todavía en noviembre el déficit corriente aumentó un 4,29% con respecto al mismo mes de 1991, ya que se cifró en 121.300 millones de pesetas, frente a los 116.300 millones de noviembre de 1991.En los movimientos de capital a largo plazo volvieron a registrarse entradas netas, aunque por un importe sensiblemente inferior al mismo mes del año anterior. Esta partida se redujo en un 43% a causa, principalmente, de las ventas netas de deuda pública española por parte de no residentes, señala el banco emisor, y a la menor afluencia de inversiones extranjeras y de créditos del exterior.
Asimismo, se produjo una sustancial salida neta de capital a corto plazo, "fruto de las extendidas expectativas; de una segunda devaluación de la peseta, que finalmente se produjo el pasado 22 de noviembre", explica el Banco de España.
El dato más significativo en la evolución del sector exterior en el mes de noviembre es, a juicio del banco emisor, que tras las turbulencias monetarias de septiembre y octubre, el saldo neto por inversiones ex tranjeras (inversiones menos desinversiones) volvió a ser positivo con 67.000 millones de pesetas.
También y gracias al aumento en un 22% de los ingresos netos por turismo, el superávit de servicios aumentó ligeramente (en un 3,3%).
En lo que respecta al déficit comercial, la buena evolución de las exportaciones, que crecieron un 3,1% -por encima del 2% al que aumentaron las importaciones- permitieron que esta variable se estabilizara en noviembre a niveles similares a los del mismo mes de 1991. Las devaluaciones de la peseta y el menor crecimiento de la demanda interna están ayudando a corregir el deterioro de los déficit comercial y corriente, señala el Banco de España. Con todo, el déficit corriente acumulado hasta noviembre supera en un 42% el total previsto por el Ministerio de Economía para este año en los Presupuestos de 1992.
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