Dietas, complementos y alguna nomina generosa
La comparación de los pagos de personal en los diversos partidos aporta algunas observaciones sorprendentes. El Partido Liberal, un pequeño grupo político presidido por José Antonio Segurado, coligado en su día con AP y hoy desaparecido, pagó a sus empleados 64 millones de pesetas, sólo 16 millones menos que los que destinó al mismo fin Convergéncia Democrática de Catalunya, un partido mayoritario y gobernante en su comunidad.Dirigentes de Alianza Popular en esas mismas fechas, 1988, Antonio Hernández Mancha ocupaba la presidencia- percibieron de forma periódica y en cuantías similares cerca de 35 millones de pesetas para gastos de representación. Cuando el Tribunal de Cuentas pidió explicaciones a ese partido, ante la carencia de una justificación expresa de esos gastos, la respuesta fue que se trataba de dinero para dietas y gastos, de desplazamientos.
Algunos pequeños grupos, como el Partido Comunista de los Pueblos de España (PCPE) no han presentado todavía hoy sus cuentas de 1988.
