Bosnia y Croacia reafirman su alianza contra Belgrado
La cúpula política y militar croata en Bosnia-Herzegovina, el ministro de Defensa de Croacia, Gojko Susak, el primer ministro bosnio, Mile Akmadjic y mandos militares de las fuerzas musulmanas en el ejército bosnio reafirmaron ayer su alianza militar contra Serbia, que estuvo cerca de la ruptura hace pocas semanas.
"Ya no hay problemas entre nosotros y no puede haberlos. Tiene que haber unidad de acción plena en la lucha contra el agresor serbio, como la que estamos demostrando ahora mismo en Maglaj', manifestó a EL PAÍS el portavoz del Consejo de Defensa Croata (HVO) que participó en el encuentro, Veso Vegar, en uno de los escasos edificios no des-truidos por la artillería serbia en Mostar, capital de la Herzegovina. Entre los participantes musulmanes estaba el ya célebre general del ejército bosnio Mate Sarlija-Daidza que con sus "boinas rejas" es uno de los mandos más influyentes en la tropa.Maglaj, una ciudad de Bosnia central defendida por fuerzas conjuntas croato-musulmanas, seguía ayer bajo intensos ataques de infantería serbia apoyada por carros de combate en lo que el general francés de los cascos azules, Philippe Morillon, calificó como "flagrante violación del alto el fuego por unidades serbias".
El general francés rechazó la posibilidad de que este ataque pudiera deberse a falta de coordinación de las fuerzas serbias con su mando y aseguró que un ataque de esta entidad ha tenido que ser ordenado por un alto dirigente de la parte serbia. También se registraron combates en otros frentes, acercando aún más el fin de un alto el fuego en el que pocos creían y que para muchos nunca existió.
Ayer en Mostar, varios participantes pusieron en duda la capacidad de los defensores de Maglaj para resistir, pero dejaron claro que este posible revés no empaña la clara mejora de las posiciones militares bosnias tras varios éxitos en el norte de Bosnia y el este de la Herzegovina.
Los enfrentamientos armados entre miembros del HVO y fuerzas musulmanas del ejército bosnio en ciudades como Travnik y Prozor, que provocaron varias decenas de muertos, habían creado una grave tensión entre las dos comunidades aliadas. Ayer, mientras en las desoladas calles de la ciudad medieval soldados musulmanes y croatas se encaramaban a camiones para acudir al frente oriental, en la sala todos los oradores abogaban por la unidad de alianza y eliminación de los recelos. El oficial del HVO, Veso Vegar, insistió en que la formación del Gobierno de Herzeg-Bosnia en la Herzegovina mayoritariamente croata no es una emulación de la proclamación de Estados serbios en las zonas ocupadas por las fuerzas de Radovan Karadzic. "Nosotros luchamos por la integridad de Bosnia-Herzegovina. Queremos una autonomía para esta región mayoritariamente croata pero no para una anexión a Croacia", dijo Vegar.
[El ejército serbio entregó ayer a la Cruz Roja a 756 prisioneros musulmanes y croatas del campo de detención de Manjaca, al noroeste de Bosnia, informa France Presse].
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