Sobre el AVE

EL PAÍS publicó el miércoles 14 de octubre un reportaje en el que, bajo el título AVE en picado, se exponían diversas consideraciones sobre una posible baja ocupación del AVE en el futuro, basándose en los datos e impresiones recogidos el martes 13 en la estación de Madrid-Puerta de Atocha. Considerando la credibilidad de que goza ese medio y las consecuencias negativas que la publicación de tales informaciones pudiera tener sobre la ocupación real del AVE, y para ayudar a situar la realidad de los hechos en su punto, le ruego la publicación de la presente carta.La ocupación de un servicio de trenes nunca puede evaluarse por las primeras circulaciones. De hecho, al lanzar un servicio nuevo se realizan previamente los correspondientes estudios de mercado, se define el producto en función de ellos y se fijan unos objetivos comerciales, que se alcanzarán al cabo de un tiempo de lanzamiento, promoción, reajuste, adaptación y maduración.

De hecho, la experiencia de otras redes ferroviarias indica que los resultados de un servicio no se pueden contrastar hasta meses después de su implantación. En el funcionamiento del AVE ha habido dos periodos claramente diferenciados: uno, el de duración de la Expo, y el segundo, el que empezó el 13 de octubre. De hecho, la experiencia del primer periodo demuestra lo inútil de hacer previsiones en función de los primeros trenes.

Efectivamente, en EL PAÍS del día 22 de abril de 1992 se destacaba que "el AVE estrena su servicio regular con un tercio de asientos vacíos". Lo engañoso de la extrapolación de estos datos queda de relieve ahora que ya se ha comprobado que en el periodo Expo se han transportado 829.572 viajeros, con una ocupación media del 81% y con puntualidad del 99,30%. Estos resultados están muy por encima de lo alcanzado por los trenes de alta velocidad de otros países en sus primeros meses de funcionamiento.

Entramos ahora en una fase nueva de consolidación, en la cual se han adoptado una serie de medidas comerciales (mayor discriminación de precios, ofertas especiales para la tercera edad y los niños como tienen todas las redes de alta velocidad del mundo, mayor frecuencia, lanzaderas a Ciudad Real y Puertollano), basadas en un plan de marketing y con unos objetivos comerciales concretos.

Extrapolar el resultado de la primera mañana al conjunto del servicio parece inadecuado. De hecho, en el sentido Madrid-Sevilla, los trenes circulados en la mañana del jueves 15 de octubre duplicaron ya los viajeros de los trenes circulados el martes 13, sin qué ello, naturalmente, tampoco signifique nada aún respecto a la consecución de los objetivos comerciales.

He de señalar, sin embargo, que, según los estudios realizados, el AVE es un producto que cuenta con una gran apreciación y valoración por parte de sus clientes, que creemos que alcanzará una posición preeminente en un mercado cuyo volumen permite prever que la participación del AVE le hará conseguir los objetivos comerciales de ocupación, situados entre el 60% y el 65%, y logrando con ello unos resultados de explotación positivos- , director general de servicios del transporte de Renfe.