Un giro hacia el Este en el partido
Volker Rühe, el exhuberante y poco sutil ministro de Defensa alemán, que fuera secretario general de la CDU y que últimamente se perfilaba como el más probable delfín del canciller Kohl, ha sufrido un revolcón político que parece, de momento, descartarle de esta lista de sucesores, tan escuálida, que casi no tiene miembros. Cinco aspirantes se presentaban para las cuatro vicepresidencias del partido y, contra todo pronóstico, Rühe fue quien se quedó fuera.Su lugar fue ocupado por un recién llegado, Heinz Eggert, ministro de Justicia de Sajonia, que no presentó su candidatura hasta el último momento, pero que acabó siendo el que más votos obtuvo de los cinco, empatado, con otra política ossi (de la extinta República Democrática Alemana), la ministra de Mujeres y Juventud Angela Merkel.
Según algunos observadores, la llegada de Eggert -un clérigo protestante que fue incluso torturado por la policía política de la Alemania comunista y cuyo discurso conmovió a todos los delegados- a lo más alto de la CDU, no hay que verla aisladamente. La inexistencia de una figura alternativa al canciller Kohl, cuando sus índices de popularidad están bajo mínimos, permite descubrir a un político de peso, el ministro presidente de Sajonia, Kurt Biedenkopf, un viejo enemigo del canciller, como el vencedor del congreso.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.