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Cooperativistas de PSV en Valdebernardo se quejan de que sus pisos les cuestan un 30% más

A la cooperativa de viviendas PSV, vinculada al sindicato UGT, le ha salido un grano en Valdebernardo, un polígono urbanístico situado entre Moratalaz y Vicálvaro, donde 2.700 familias esperan como agua de mayo un piso de protección oficial. Creían que iban a recibir una vivienda de 100 metros cuadrados, con garaje, por el precio oficial de 10 millones de pesetas. Ahora, un sector de los socios se queja de que los responsables de PSV han anunciado que la casa costará más de 13 millones. "Los estatutos de la cooperativa autorizan a repercutir a los socios todos los costes y la financiación de la promoción", alega el gerente de PSV, Carlos Sotos.

Sotos -que tiene contratadas 21.000 viviendas en toda España- se enfrenta ahora con un sector de cooperativistas descontentos con los precios de la promoción. Cada uno de los afiliados a Valdebernardo ha entregado ya a cuenta unos cuatro millones. Para esta tarde está prevista la constitución de la Asociación de Futuros Vecinos de Valdebernardo.El gerente de PSV advierte de antemano que en el vecino barrio de Moratalaz una vivienda similar a las de Valdebernardo -pero de precio libre- cuesta más de 22 millones, sin contar los gastos de financiación.

El jueves se reunieron los cooperativistas que promueven la Asociación de Futuros Vecinos de Valdebernardo, con cerca de 600 adjudicatarios. En tres sesiones informativas les dieron cuenta de las anomalías que, en opinión de la junta directiva provisional de la asociación, se habían observado en la promoción.

La preocupación había surgido entre los cooperativistas cuando recibieron la noticia de que en los 10 primeros días de octubre tienen que elegir su proyecto de vivienda, y que para ello es imprescindible el pago de 408.000 pesetas. Esta cantidad difiere de la anunciada: 318.000 iniciales (en las que se incluían 10.000 pesetas de la cuota de socio y 80.000 pesetas en concepto de gastos de gestión, que ahora se piden aparte).

Otras de las protestas que, según los promotores de la asociación, aún no ha sido aclarada por PSV es la razón del incremento del precio del piso, ya que no se adapta a las normas de las viviendas de protección oficial.

En la reunión del jueves, los comentarios de los socios reflejaban la angustia generada por los préstamos que deberán solicitar a los bancos, ya que esperaban que el precio de sus viviendas no superase el fijado para los pisos de protección oficial.

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Al mismo tiempo, aseguran que hasta ahora venían pagando una mensualidad media de 35.000 pesetas desde la fecha de inscripción, una cuota que se ha triplicado ahora. También critican que el precio del garaje -considerado como de precio libre- es en estos momentos de 1.600.000 pesetas.

Los cooperativistas hacían cálculos sobre el coste de sus pisos, que preveían en torno a los 10 millones, pero ahora se enfrentan a una factura global de más de 13 millones. Las dudas quedaron en el aire en la reunión de los socios, ya que reconocen que su contrato con PSV les "obliga a todo y no compromete a nada". Por el momento, la promoción de PSV en Valdebernardo, donde integra un consorcio urbanístico con el Instituto de la Vivienda de Madrid (Ivima) y la cooperativa Vitra, vinculada al sindicato CC OO, aún no ha obtenido la licencia de obras del Ayuntamiento de Madrid. Mientras, los trabajos de explanación de terrenos y de urbanización están ultimados.

La directiva de la Asociación de Futuros Vecinos de Valdebernardo manifestó su pretensión de conocer "el papel que en todo el proceso tiene el sindicato UGT". En el orden del día de la reunión que tienen previsto celebrar esta tarde los socios figura una propuesta de acuerdo para plantear sus reclamaciones a los responsables de PSV.

Por su parte, Carlos Sotos, el gerente, critica al "sector minoritario de socios", a quienes acusa de representar "oscuros intereses", por exigirle la entrega de listado de cooperativistas.

Coste real, coste oficial

Sotos reconoce que en la promoción de Valdebernardo la plaza de garaje es independiente de la vivienda de protección oficial. Además, la cooperativa, como entidad asociativa, tiene que financiar todos y cada unos de los costes que origine la construcción de la vivienda.Esta discrepancia entre coste real y precio oficial se debe, según Sotos, a un "efecto perverso" generado por la normativa". Hacienda se resiste a incrementar los módulos que fijan los precios de protección oficial -por ejemplo, este año sólo han aumentado un 2%-, porque el Estado tiene que subvencionar las viviendas protegidas; si la vivienda vale más tiene que aportar más financiación".

En resumidas cuentas, el coste oficial de una vivienda protegida en Madrid oscila entre los 7 y los 10 millones, en función de la superficie útil; el de la plaza de garaje ronda el millón y medio de pesetas, y los gastos de financiación y promoción suponen entre uno y dos millones. Así las cosas, el cooperativista tiene que pagar hasta 13 millones para disponer de un piso protegido en Valdebernardo, pero también en Madrid Sur (Vallecas) o en las promociones del Plan 18.000 del Ayuntamiento (donde también participa PSV).

Sotos asegura que las llaves de las viviendas de Valdebernardo se entregarán en 1994. Por el momento, PSV sólo ha recibido 20 solicitudes de baja entre los 2.700 cooperativistas.

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