Roca presentará su candidatura a la secretaría general de CDC

El secretario general de Convergéncia Democrática de Catalunya (CDC), Miquel Roca, regresa hoy de Sevilla, tras cuatro días de vacaciones, sin haber desvelado públicamente si piensa o no presentar su candidatura a la reelección en el congreso que el partido nacionalista celebrará los próximos días 17 y 18 de octubre. Los más estrechos colaboradores de Roca confían en que durante este fin de semana rompa su silencio y haga pública su candidatura a la reelección.El grado de convencimiento de que Roca continuará es tal entre sus colaboradores que el secretario de Organización, Josep Caminal, y el responsable de Coordinación, Enric Renau, preparan el congreso de CDC contando con que no habrá ninguna novedad en la secretaría general.

El presidente de la Generalitat, Jordi Pujol, ha rodeado el retorno de Roca a Barcelona de un halo de misterio que no parece corresponderse con la realidad ni con la información de que dispone. El pasado martes en Estrasburgo (Francia) Pujol, cansado de la táctica dilatoria de Roca, explotó y le urgió a que se comprometiera. Roca ha contestado al envite de Pujol de la manera que a éste menos le gusta: guardando silencio.

El comportamiento de Roca en esta cuestión no es del agrado del presidente de la Generalitat y de Convergéncia, poco acostumbrado a ir a remolque de las decisiones que se adoptan en el seno de su partido y en la coalición Convergéncia i unió. En esta ocasión, Pujol. está a merced de Roca y además es consciente de que no puede presentarse sin su pareja de siempre en el próximo congreso, ya que quedaría como el responsable de la ruptura de un binomio que ha sido clave en la política catalana desde la restauración de la democracia.

Reproches

El zurrón de reproches de Roca a Pujol está ahora más lleno que de costumbre: Fin del apoyo a la política económica del ministro Carlos Solchaga anunciado por Pujol a la prensa sin mediar discusión ninguna y dejando al secretario general de CDC en una. innecesaria posición de debilidad; cambio en el Gobierno catalán -nombramiento de un nuevo consejero de Agricultura y de un comisionado para Actuaciones Exteriores- decidido por Pujol en solitario y comunicado a Roca cuando la noticia ya estaba en los medios de comunicación, y una permanente sensación de soledad en las decisiones que adopta, ya que el silencio de Pujol es utilizado fraccionalmente por los detractores de Roca. Todo ello con el entorno familiar de Pujol pisándole los talones, cuestionando públicamente sus decisiones y presentándole como un político obsesionado por entrar en un Gobierno de coalición con el PSOE.