Martín Villa y Hormaechea buscan salida a la crisis cántabra
La decisión de la directiva del PP de delegar en su grupo parlamentario de Cantabria el cierre de la crisis abierta por la dimisión de seis consejeros del Gobierno regional suscitó ayer severas críticas de la oposición. El presidente Juan Hormaechea viajó a Burgos, donde debía tener un encuentro con Rodolfo Martín Villa en un intento de buscar una solución a la crisis. Martín Villa, miembro de la directiva del PP, ya actuó de negociador a raíz del pacto con la extinguida Unión para el Progreso de Cantabria.Los socialistas, según anunció el portavoz de su grupo parlamentario Miguel Ángel Palacio, exigirán responsabilidades en el próximo pleno de la asamblea regional. Consideran que de forma urgente el presidente está obligado a formar Consejo de Gobierno para dar a continuación explicaciones a los ciudadanos.
El máximo dirigente regionalista, Miguel Ángel Revilla, cree que las conclusiones de la reunión de anteanoche son "un nuevo capítulo del famoso culebrón de Cantabria, del que tanto se ha hablado y en el que siempre ganan los malos. Aquí sólo hay un responsable", agregó Revilla, "que es José María Aznar, quien debe venir urgentemente a Cantabria a enderezar la situación".
Unos 50 miembros de la junta directiva del PP (que integran 99 personas) debatieron en un hotel de la ciudad más de cinco horas, desde las 19 del pasado día 22 a las 0.20 de ayer martes, la situación política de la comunidad.
Al finalizar el acto el presidente del partido, José Luis Vallines, declaró que ' el Grupo Popular en la asamblea regional permanece unido. "Seguimos siendo 21 diputados y en estos días resolveremos los problemas pendientes". Vallines se negó a denominar "nuevo Gobierno" al que surja tras la renuncia a sus cargos de los seis consejeros populares. "Y no será nuevo porque será nuestro, del Partido Popular", subrayó.
Para Hormaechea, que demora más de lo previsto la composición del nuevo Ejecutivo, éste se formará "cuando se tengan los contactos precisos para alcanzar un total consenso entre el grupo parlamentario y el presidente de la Diputación".
