La Asamblea se construirá otra sede si Justicia no cede Parcent

El pacto entre el PSOE e Izquierda Unida en la Asamblea de Madrid funciona. El Partido Popular pretendió ayer a toda costa evitar la construcción de una nueva sede que sustituya al achacoso edificio del Parlamento autónomo: prefiere la cesión de un edificio de la Administración central. Pero los dos socios de izquierda impusieron su mayoría. La Asamblea se construirá una propia sede en alguno de los solares que posee la Comunidad de Madrid si no fructifican "en un tiempo razonable" las negociaciones con el Ministerio de Justicia para trasladar al palacio de Parcent el hemiciclo regional.El presidente de la Comunidad de Madrid, Joaquín Leguina, dio la sorpresa al comparecer personalmente en lugar de enviar sólo a alguno de sus consejeros. El PP, cogido a contrapié, había distribuido ya una nota en la que calificaba la inasistencia de Leguina de "acto de cobardía política".

El diputado del PP José López inició las hostilidades: "Leguina es el responsable de la ruina de la Asamblea y culpable de que no tenga una sede digna". Leguina, que, en contra de su costumbre, intervino tres veces en los debates, definió el discurso del diputado popular como "sarta de provocaciones ( ... ) costroso, cutre e insultante".

Más tarde, el portavoz del PP, Alberto Ruiz Gallardón, salió al quite: "Leguina, usted está nervioso ( ... ) y es uno de los políticos en activo que más desprecia al Parlamento".

Tengo la sensación de que discutimos por una sede -que no debe utilizarse como un pretexto o un arma arrojadiza- y nos olvidamos de los problemas de los madrileños", terció la portavoz de IU, Isabel Vilallonga.