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Los incendios arrasaron en lo que va de año un tercio de la superficie quemada en 1991

En los ocho primeros meses de 1992, y una vez pasado uno de los meses fatídicos para los incendios -agosto-, se han quemado en España 68.134 hectáreas, una tercera parte de lo que ardió en este mismo tiempo el año pasado. El número de incendios, sin embargo, ha superado los 8.000, cuando en 1991 fueron 6.487. Un nuevo sistema informático de medición por satélite permite este año delimitar con mucha mayor exactitud las extensiones destruidas. En algunos casos, los resultados definitivos son solamente una tercera parte de los que se publican al principio, en todo el fragor del incendio.

Han ardido en lo que va de año 22.667 hectáreas arboladas (un 22% de las quemadas en ese tiempo en 1991) y 45.467 hectáreas sin árboles (un 45% respecto a 1991). En los últimos cuatro años, la superficie quemada entre enero y agosto era de unas 200.000 hectáreas.Los incendios más importantes se han producido este año en Huelva (en julio) y en la, Comunidad Valenciana (finales de agosto). En esta región y según los primeros cálculos, 60 incendios forestales calcinaron unas 12.000 hectáreas a comienzos de esta semana. El pasado fin de semana registró también algunos de los focos más devastadores: siete incendios arrasaron 850 hectáreas en la provincia de Málaga; otro arrasó 500 hectáreas en la sierra de Francia (Salamanca). Siempre de acuerdo con las primeras estimaciones.

Exageraciones

Juan Carlos Mérida, jefe de Estadística de Incendios Forestales en el ICONA, quiere matizar estas primeras cifras: "Suelen ser exageradas, basadas en cálculos muy toscos; a ojo, o con un plano, que no siempre es lo bueno que cabría esperar. Para hacernos una idea, ahora estamos elaborando los datos definitivos de 1990 a partir de miles de partes de incendios". Un nuevo método introducido este año por el ICONA permite medir con exactitud -admite sólo errores de 10 metros, más o menos- las extensiones cal cinadas. Es el sistema de Posicionamiento Global por Satélite (GPS), una tecnología empleada especialmente en Estados Unidos y Canadá, cuya puesta de largo fue la guerra del Golfo, y que facilita, sirviéndose de la red de satélites, la loca lización precisa de cualquier punto en la Tierra.

Las mediciones se realizan con un equipo, que cuesta 2,5 millones de pesetas, colocado en un helicóptero que sobre vuela, lo más bajo posible, el perímetro de la superficie que mada. En 10 minutos se conoce el dato exacto en hectáreas. El ICONA tiene un equipo, y otro la Junta de Andalucía. Según Mérida, "esperamos contar con más en 1993 para evitar las exageraciones iniciales, y las especulaciones de cifras". Pone un ejemplo: en el incendio del pasado fin de semana en Salamanca no ardieron 700 hectáreas, sino 352.

El bajón más espectacular en superficie quemada lo registra Galicia, que ha pasado, según la Xunta, de 35.000 hectáreas en agosto de 1989 a sólo 479 en 1992. Cataluña, Aragón y Madrid, muy castigadas otros anos, mantienen tasas bajas. Las provincias de León, Huelva y Valencia, y Asturias son las que llevan peor año.

300 pirómanos españoles

La piromanía es una enfermedad mental que comienza en la niñez y se calcula que afecta actualmente a unos 300 españoles, según afirma el doctor Adolfo Calle, presidente de la Sociedad Valenciana de Psiquiatría.La piromanía es, según Calle, una enfermedad que afecta más a los hombres que a las mujeres. Quienes la padecen suelen ser personas con un coeficiente de inteligencia normal o bajo, suelen ser bebedores y tener una historia personal con rasgos antisociales. Calle compara esta enfermedad con la cleptomanía, la ludopatía Gugadores compulsivos) y la tricotilomia (arrancarse el propio cabello).

"Cuando los provocan", cuenta Calle, sienten una tensión o estímulo afectivo grande antes de prender el fuego, seguido de un intenso placer, gratificación y sensación de relax cuando el fuego está en marcha y viéndolo progresar". "No están locos", añade, "sino que padecen un desorden de control de impulsos".

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