Los bomberos profesionales se niegan a colaborar con los voluntarios

Los bomberos madrileños acordaron ayer en una asamblea general, a la que asistieron 200 profesionales, no colaborar con los bomberos voluntarios, en tanto no se precisen las funciones de este cuerpo no profesional. Los trabajadores rechazan el Reglamento de Bomberos Voluntarios, aprobado por la Comunidad de Madrid el 28 de mayo pasado, aunque aceptan la existencia de colaboradores, siempre que se regule convenientemente.Los profesionales entienden que con la creación de un cuerpo no profesional se pretende atribuir a los bomberos voluntarios labores que no les corresponden y temen que pueda sevir de "coladero" en el cuerpo para personas sin formación. También señalan que en situaciones arriesgadas se puede poner en peligro la vida de los voluntarios, que además llegan a estorbar la labor de los bomberos. Al mismo tiempo, consideran que la nueva norma es ilegal porque la Comunidad se atribuye competencias que corresponden a los ayuntamientos.

Formación

El decreto de creación de los grupos de voluntarios implanta un periodo de un año de formación teórico-práctica. Pero los bomberos consideran injusto que se impartan cursos a los voluntarios mientras ellos no tienen una formación continua adecuada, tan sólo 40 horas de charlas en el último año.

El director general de Protección Ciudadana de la Comunidad de Madrid, Jorge Murtra, afirma que los cuerpos de bomberos voluntarios sirven para fomentar la concienciación y participación ciudadana en la prevención de incendios forestales.

El reglamento establece que los bomberos voluntarios dependen de los profesionales y obliga a que estén adscritos a un parque del servicio de extinción de incendios y salvamento.

Los empleados de los servicios de extinción de incendios de la comunidad madrileña quieren que, junto con la regulación del voluntariado se negocie un estatuto de bomberos.