Hurd discute con Gali sobre el polémico control de la artillería serbia en Bosnia

La coordinación de los esfuerzos de la Comunidad Europea (CE) y de las Naciones Unidas para resolver la crisis yugoslava y "evitar sorpresas y malentendidos" fue el centro de la entrevista celebrada ayer en Nueva York entre Douglas Hurd, secretario del Foreign Office, y Butros Gali, secretario general de la ONU, quien horas antes había desautorizado al Consejo de Seguridad en su petición de supervisar el armamento pesado en Bosnia.

Hurd declaró que el control de la artillería pesada en Bosnia-Herzegovina es "la clave de la paz" tras el acuerdo de alto el fuego firmado, bajo auspicio de la CE, el pasado viernes en Londres, por los representantes musulmán, serbio y croata. Sin embargo, responsables de la ONU intentaban ayer quitar importancia al enfrentamiento entre el secretario general y el Consejo de Seguridad y la CE.Butros Gali respondió a la petición de supervisar el armamento pesado desplegado en Bosnia con una dura carta en la que acusa a los miembros del Consejo de haber tomado decisiones sin consultarle.

Basándose en razones de principio y en consideraciones prácticas, Gali señala: "He llegado a la conclusión, de que no existen las condiciones para que recomiende al Consejo de Seguridad la supervisión por parte de la ONU de todas las armas pesadas". En lo que se refiere a las consideraciones prácticas, Gali estima que la aplicación del acuerdo de Londres requiere el respeto del alto el fuego durante vanas semanas, y añade que, a pesar de su compromiso, ninguna de las partes en conflicto ha comunicado a las Fuerzas de Protección de la ONU (Unprofor) la cantidad y ubicación de su armamento pesado.

Butros Gali recordó que la ONU no participó en las negociaciones de Londres -"creo que todos los funcionarios de la ONU deberían participar en las negociaciones de todos los acuerdos susceptibles de confiar un papel a las Naciones Unidas"-, y subrayó que la misión suplementaria que se pide a las Unprofor rebasa "pura y simplemente la actual capacidad operativa y logística de la ONU". Según el diplomático egipcio, la ONU dedica demasiados recursos a la antigua Yugsolavia. "Hay una cuestión de prioridades" dice. "La dedicación de tanta atención y de tantos recursos a los problemas yugoslavos se hará en detrimento de la capacidad de la organización de resolver conflictos tan crueles y peligrosos, como, por ejemplo, en Somalia". La referencia a Somalia irritó a ciertos miembros del Consejo de Seguridad que consideran que Butros Gali juega la carta africana para dividir al Consejo.

Por otra parte, el Ministerio de Defensa español ordenó ayer el regreso del avión Hércules de la Fuerza. Aérea que participaba en el puente aéreo humanitario entre Zagreb y Sarajevo, debido a "anomalías técnicas en su tren de aterrizaje, que no afectan a la seguridad en vuelo", según una nota oficial.

El Hércules, que partió de Madrid el lunes, debía regresar ayer, pero se decidió inicialmente prolongar la misión, debido a que sólo pudo realizar dos vuelos a Sarajevo en tres días por el cierre de dicho aeropuerto.

En el segundo de estos vuelos, el día 22, trasladó al presidente de Bosnia-Herzegovina, Alia Izetbegovic, quien se entrevistó en Zagreb con su colega croata, Franjo Tudjman. En total transportó 32 toneladas de alimentos y medicinas.