_
_
_
_

Los socialistas japoneses confían en una pérdida de votos del Gobierno

Juan Jesús Aznárez

Los socialistas japoneses, en la oposición desde 1955, confían en que la apuesta del Gobierno de Tokio por la promulgación de la polémica ley que permite el envío de tropas niponas al exterior prohibido tras la derrota de la II Guerra Mundial, se reflejará en una pérdida considerable de votos del gubernamental Partido Liberal en las elecciones que el próximo domingo se celebrarán para ocupar 127 escaños del Senado. Por primera vez, participa en los comicios el Nuevo Partido de Japón, creado hace poco más de dos meses con un lema principal: la lucha contra la corrupción.

Pasquines con los mejores perfiles de 614 candidatos de 30 partidos, la mayor parte puramente testimoniales o de extravagantes consignas, empapelan Tokio, mientras furgonetas con megáfonos recorren las calles animando al voto. Todos prometen una mejor calidad de vida y más prosperidad económica en estos momentos de retroceso en el crecimiento.Cualesquiera que sean los resultados, los liberales seguirán gobernando el país al controlar dicho grupo la poderosa Cámara baja del Parlamento.

Los encuestadores piensan que el partido del primer ministro, Kiichi Miyazawa, acaparará unos 64 asientos. La consulta constituirá el primer escrutinio público del mandato del actual presidente de Gobierno, que en noviembre sucedió a Toshiki Kaifu. Este político liberal intentó vanamente una rebelión contra el aparato del partido y fue defenestrado al querer aplicar una reforma política aperturista que ha quedado aplazada sine die.

Los liberales, apoyados por el empresariado, los arroceros y el sector conservador de la sociedad nipona, intentarán recuperar puestos en el Senado, cuya mayoría perdieron en las elecciones de 1989 al coincidir la votación con el desmantelamiento del Gobierno de Noboru Takeshita en la crisis desencadenada tras el escándalo Recruit y las revelaciones de que el nuevo primer ministro Sosuke Uno pagaba a una geisha para mantener con ella relaciones sexuales. En aquella legislatura, únicamente lograron 36 representantes en la Cámara alta, cuando en todas las anteriores elecciones habían conseguido entre 62 y 72 diputados de 126 en disputa.

Un nuevo elemento

Los socialistas cuentan en esta ocasión con un nuevo elemento aparentemente en su favor: la ley que autoriza el despacho de militares al exterior, en misiones promovidas por la ONU, un texto controvertido que fue denunciado como inconstitucional por la oposición socialista y comunista, y aprobado mientras los sondeos de opinión indicaban que la mayoría de los japoneses, por un margen muy reducido, lo rechazaban.El Senado, creado en 1947 como contrapeso de la Cámara de representantes, cuenta con 252 escaños con un mandato de seis años. Cada tres se registra una renovación de 126 miembros, 50 surgidos de distritos electorales con representación proporcional, 76 de los distritos provinciales. En esta ocasión se cubrirá uno más al haber quedado vacante.

Los liberales, beneficiados en las urnas en los tiempos de crisis económica, incidirán en asegurar un mejor futuro con un ambicioso programa financiero y de inversión pública.

El partido en el Gobierno dispone de 113 hombres en la Cámara alta, los socialistas, 7 l,,, el centrista Komeito 20 y el partido comunista, 14. El resto de escaños se distribuye entre partidos menores. El Nuevo Partido de Japón, creado hace dos meses y liderado por Morihiro Hosokawa, de 54 años, antiguo gobernador de la provincia de Kumamamoto, parte con el supuesto de que los japoneses están hartos de la corrupción y de que el 60% de ellos está firmemente convencido de que las reformas políticas únicamente pueden ser llevadas a cabo por una tercera fuerza, distinta a las tradicionales.

Sin embargo, según el comentarista Minoru Morita, tras estas elecciones "el país no sufrirá un terremoto y el Gobierno de Miyazawa logrará una mayor estabilidad".

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_