"Mi máxima aspiración es ser sencilla y honesta"
Es tan poco diva en una conversación como en el teatro. "Soy una intermediaria de la música. A mí me llega de dentro y tengo la suerte de que al proyectarla hacia afuera llega al público fácilmente". La máxima aspiración de Freni es que "piensen de mí como una artista sencilla y honesta". La ópera es, para Mirella Freni, algo tan cotidiano como el aire que se respira: "Es como si cantase en casa, con la diferencia de que la presencia de la gente te infunde una fuerza especial".No es partidaria de los recitales masivos al aire libre, porque "la acústica es imperfecta y factores como la temperatura pueden convertirse en peligrosos. Respeto que otros lo hagan, pero no es mi caso, no me encuentro a gusto. En las actuaciones multitudinarias en grandes espacios no se cumplen las condiciones necesarias para que haya arte verdadero. En cuanto al valor divulgativo, creo que es mucho mayor el que se produce en las salas de conciertos y teatros de Opera".
Treinta y siete años de ejemplar carrera jalonan la trayectoria de Mirella Freni. Micaela, Isabel de Valois, Susanna, Zerlina, Amelia Boccanegra, Mimí, Adriana Lecouvreur, Manon Lescaut, Margarita, Lisa, Tatiana o Desdémona son algunos de os personajes que ha recreado. "Lo fundamental es cantar con naturalidad desde la infancia. Ahora todo ha cambiado y se canta menos. Los jóvenes no tienen tiempo. En mi adolescencia, la pandilla de amigos íbamos en bicicleta o andando y siempre cantábamos. Era una manera de estar juntos, de relacionarnos. En la actualidad hay muchos nervios, muchas tensiones. Falta humanidad y se ha perdido la costumbre de cantar".
La técnica
Sobre el mantenimiento de las condiciones vocales con el paso del tiempo, Mirella Freni opina: "He trabajado toda la vida para tener una técnica no digo perfecta, pero sí lo mejor posible. He cuidado el repertorio que iba en cada momento a mi voz. También he procurado distanciar las funciones, para recuperarme de los esfuerzos físicos. Si estoy en París o en Milán, estoy en París o en Milán, pero no doy saltos los días intermedios entre las representaciones para actuar en Nueva York o en Viena. Esta disciplina me ha ayudado mucho".Mirella Freni ha adelantado un día su viaje a Madrid para poder ver la exposición de Ribera en el Museo del Prado. "Probablemente no iba a tener otra oportunidad. En cualquier caso, el día anterior a una actuación prefiero llevar una vida moderada, incluso sin salir a cenar, para evitar riesgos de catarros o malas digestiones. Luego me tomo la revancha en periodos de vacaciones". El paso del tiempo y la experiencia influyen en la concepción de sus personajes: "No es lo mismo el conocimiento que se tiene del amor o del sufrimiento a una edad que a otra. Esto influye mucho a la hora de cantar e interpretar". Pero lo que no varía para Mirella Freni es la "sensación de agitación después de las funciones. No puedo conciliar el sueño hasta las cinco o las seis de la mañana. Todo te pasa por la cabeza, siempre se piensa que podía mejorar".
Sobre el momento actual de la ópera, piensa Mirella Freni que "la composición está en crisis, prueba de lo cual es que se siguen representando fundamentalmente obras de los siglos XVIII y XIX. No es que los autores de hoy no tengan en cuenta la voz, sino que la utilizan de una manera menos melodiosa, reflejo del tiempo en que vivimos. Mi forma de sentir no encaja en estas creaciones, tal vez porque ya soy abuela y siempre me he movido en otro tipo de propuestas artísticas. En cuanto a las nuevas voces, las hay bellas, pero muchas se pierden pronto. No sé si no se enfocan sus desarrollos como se debe o si se trabaja demasiado deprisa".
El aspecto visual y las contribuciones de los directores de escena son para Freni "importantes siempre y cuando se respete o escrito por el compositor y se hagan evidentes las atmósferas en que se sitúan las obras. El problema es que a veces se cometen escándalos por búsquedas de autoridad o exceso de protagonismo. Yo estoy a favor de las novedades en el teatro y en la vida, pero no de las locuras".
A Mirella Freni nunca se le ha pasado por la cabeza hacer música ligera: "Me sentiría ridícula. La técnica de ópera es muy diferente. Una cosa es que tararee familiarmente una canción de éxito y otra muy distinta cantarla en público con intenciones comerciales. No es mi estilo". Auténtica loca del fútbol, utiliza el registro grave de la voz cuando habla de su equipo preferido, el Milan: "Es nuestro año; hemos ganado la Liga sin perder un partido". De los toros, le gusta únicamente la ambientación y el paseíllo, "después sufro mucho por el toro y por el torero".
