La sede de LAB en San Sebastián servirá de estafeta para comunicar con ETA

La sede del sindicato LAB en San Sebastián ha sido durante los últimos dos años una especie de estafeta de ETA, según las declaraciones de Juan José Latasa Guetaria, tesorero del sindicato, detenido el pasado día 9 por la Guardia Civil. Latasa hizo de correo al menos cinco veces entre el diputado de HB Rafael Diez Usabiaga y el dirigente etarra José Luis; Alvarez Santacristina, Txelis, quien recibía informes sobre LAB, HB y otras organizaciones.

Además, en la sede de LAB se recogían recados urgentes de miembros de comandos para la dirección de ETA, según la declaración de Latasa. Díez Usabiaga, coordinador general de LAB, contra el que el juez Baltasar Garzón ha iniciado un procedimiento, convenció a Latasa en junio de 1990 para que con cierta regularidad pasara documentos a o desde Iparralde (País Vasco francés). Con la "sospecha" de que el destinatario sería un miembro de ETA, Latasa se dirigió al hipermercado Bricobidart, donde debería contactar con un tal Philipo. Tras localizarle, éste le dio un sobre para que se lo entregara a Díez Usabiaga.

En septiembre de 1990, el coordinador de LAB entregó a Latasa un nuevo paquete con documentos, además de unas casettes. "En lo sucesivo", afirma el tesorero del. sindicato, "cada viernes que encontraba un sobre en mi mesa, ya sabía que tenía que llevarlo a Bricobidart, donde debería entregarlo entre la una y las dos de la tarde del día siguiente".

Latasa reconoció en los interrogatorios que hizo de correo cinco veces con un intervalo de cuatro o cinco semanas. En varias ocasiones le entregaron en Francia paquetes para que los dejara en la mesa del diputado Díez Usabiaga. El tesorero de LAB supo después que el tal Ph1lippo era Philipe Lasalle Astiz, la persona que fue seguida durante: meses por la Guardia Civil y llevó involuntariamente hasta la. cúpula de ETA.

Informes sobre HB

Latasa explicó a la Guardia Civil que "ignoraba el contenido de los sobres que llevaba a Francia, aunque creía que eran documentos de LAB y y de HB para que los estudiase la organización". En dos ocasiones acudió a las citas en Bricobidart un individuo rubio desconocido. "Cuando se lo describía Rafael Diez Usabiaga, me dijo que era Txelis", confesó Latasa. El presunto miembro del comando Askatu ha confesado también que su correligionario Francisco José Rollán Rodríguez le entregó en LAB una nota para que la trasladase a la dirección de ETA, cosa que hizo el pasado 21 de marzo por mediación de Philipe Lasalle. Bastantes días después, Rollán volvió a la estafeta de LAB, inquieto por conocer la respuesta de la dirección. Pero Latasa le respondió que no creía que fuese a producirse respuesta tras la detención de la cúpula etarra en Bidart, el 29 de marzo.

José Cuerdo González, otro de los presuntos miembros del comando, también acudió a LAB para entregar una carta destinada a un tal Emílio, que no aparece identificado en las diligencias sumaríales instruídas hasta ahora, aunque se sospecha que se trata de un miembro de ETA.

Juan José Latasa, por otra parte, aprovechó su relación directa con los dirigentes terroristas para que organizaran la fuga de la prisión de Ocaña 1 (Toledo) de su hermano José Miguel. Txelis dio luz verde aunque la fuga nunca pudo llevarse a cabo.