A una holandesa
En tu carta del otro día decías que los españoles están atrasados en su mentalidad y que huelen al machismo de más rancio estilo. Estoy de acuerdo en tu visión de lo esencial; en la forma difiero, pues no creo que ese acoso sexual se limite sólo a la mujer extranjera, igualmente lo padece la española, sólo basta con que esté relativamente buena la pieza a cobrar ... ; piensa que los españoles hemos sufrido un hambre sexual de siglos, tanto como la Iglesia tuvo poder, y eso, mi amiga, no se quita en 15 años de libertad.Pasa a la página siguiente
Viene de la página anterior
No creo que los españoles consideren a la mujer nórdica como tonta, sino que la ven más libre que a la española y, por tanto, más fácil y asequible a la hora del intercambio sexual. Piensa que el hombre español es uno de los europeos que más sienten y hablan de sexo y menos lo practican. Ésas son secuelas del hambre ancestral que arrastramos.
La mujer española en estos años de libertad ha evolucionado de forma espectacular y ha dejado al hombre atrás. A pesar de ello, a la mujer española, para que sea libre, aún le falta desembarazarse de la represión que el hombre le ha metido durante años; también a la mujer nórdica le falta lo suyo, pero no tanto.
En fin, por último te diré, querida desconocida, que estoy de acuerdo contigo en que el hombre español tiene que hacer un esfuerzo superior para erradicar su mentalidad machista y convertirse en un hombre libre y tolerante; si no, padecerá en su propia carne su miedo a la libertad-
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.
