De El Dueso a La Cartuja
Los reclusos de la cárcel cántabra redimen pena trabajando para la Exposición de Sevilla
"Estamos contentos con el trabajo, pero aún lo estaríamos más si nos dejaran ir a Sevilla para verlo expuesto". Fernando I. A. retoca la maqueta de la carabela Santa María. Esta reproducción y un mural cerámico con la carta naval de Juan de la Cosa hechos por presos se expondrán en el pabellón de Cantabria en Sevilla. Del penal a La Cartuja: la Expo redime condena en la cárcel de El Dueso, en la localidad cántabra de Santoña.
"Empezamos en agosto del año pasado. Es una obra babilónica porque, con las conducciones [traslados de presos], ha habido que hacer quince veces el equipo de trabajo", prosigue Fernando. Vicente y Emilio asienten. Javi prepara una pieza a ritmo de rock: La música de J.J. Cale alegra el taller de la prisión en el que pasan cinco horas diarias.Otros dos reclusos, Jesús y Daniel, han dedicado este tiempo a preparar un mural cerámico -4,16 metros de ancho y 2,20 de alto- que reproduce la carta naval de Juan de la Cosa, marino de Santoña armador de la Santa María, que puede considerarse como el primer mapamundi.
Un tercer trabajo, el comic sobre la vida del marino santoñés, está hecho y en espera de financiación para imprimirlo. Los internos, con monitores e educadores, han debido realizar pesquisas históricas antes de ponerse manos ala obra. "Estas taré as son un buen método de rehabilitación", afirma el director del penal, José Antonio Moreta.
Sin embargo, ninguno de estos trabajos estaba destinado a la Expo: se plantearon dentro del programa de actividades "V Centenario" de una cárcel en la que -una excepción- todos los internos que lo deseen pueden trabajar. De los aproximadamente 700 que cumplen pena en las 358 celdas de Santoña sólo unos 40 se niegan a desempeñar alguna tarea, según apunta el director y confirma el juez de vigilancia, Miguel Fernández Díez.
Fue el consejero de Cultura de Cantabria, Dionisio Cortázar, quien, semanas atrás, propuso exponer los trabajos en Sevilla. Internos y responsables de taller tuvieron que pisar el acelerador para rematar las manualidades que esta semana estarán ya en Sevilla.
Etarras y armas
Este programa de actividades del V Centenario, como los cursos de formación y ciertos destinos, tienen la ventaja de redenciones extraordinarias de pena, que duplican a las normales. Aproximadamente la mitad de los presos disfrutan de ellas. Así, quien haya trabajado en estas tareas ha obtenido la rebaja de 65 días de con Jepa por trimestre, en lugar de la de30 que se perciben por otros trabajos. Además del mural y la embarcación, que se expondrán permanentemente, el pabellón de Cantabria mostrará, en la última semana de mayo, otros trabajos de los internos del El Dueso relacionados con el Y Centenario.
Se trata de reproducciones de cerámica precolombina, instrumentos musicales, joyas y armas de época. Presos de ETA -hay seis en El Dueso- an participado en la elaboración del viejo armamento. Lo que se presenta más dificil es que todos los presos que han participado en ellos acudan a verlos, en la Expo. "Estamos estudiando a posibilidad ,de que, vayan, pero quienes no disponen de permiso para salir lo tendrán realmente difícil", apunta Moreta. Según el juez de vigilancia, los permisos son "abundantes" -un centenar al mesen- en esta cárcel sin presos preventivos y con casi un centenar de extranjeros. "Hay pocos quebrantamientos", añade. Considera correcta la vida en el penal y no ha podido probar las escasas denuncias por malos tratos.
Con todo, parece imposible que todos los participantes en los trabajos destinados a la Expo puedan saludar a Curro.
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