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El alcalde pide una "intervención rápida" para limpiar el metro

La jornada de ayer, 19ª de huelga de la limpieza, estuvo marcada casi en exclusiva por las palabras. Mientras la basura se acumulaba, los políticos pidieron soluciones sin facilitar ninguna. El alcalde de Madrid fue el más drástico, pidiendo la intervención "rápida" de Protección Civil, Cruz Roja o de "quien estimen las autoridades" para limpiar el metro. Pero por si alguien pensó en los militares, en el Ministerio de Defensa aseguraron que nadie le ha pedido entrar en el asunto.

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En el Ministerio de Defensa informaron que tendría que ser la Delegación del Gobierno la que hiciera la petición formal de la intervención de los militares en el conflicto. El delegado, Segismundo Crespo, no había determinado ninguna actuación al cierre de esta edición, ya que, según un portavoz, se estaba a la espera de conocer los resultados de las inspecciones realizadas.Las vacaciones, que comienzan hoy, restan importancia al problema en los colegios y universidades, y en Barajas la situación no parece alarmante. De ahí que la atención se centrara ayer en el metro, cuya situación es penosa. Algunos empleados se han visto ya aquejados de problemas respiratorios, alergias y picores. Sin embargo, la dirección del Metro estima que, durante estos días, "el servicio médico de la empresa no ha atendido muchas más consultas que en una situación de normalidad". Desde el jueves, los. trabajadores del metropolitano tienen a su disposición mascarillas y guantes. Algunos utilizan estos medios de protección, pero muchos prescinden de ellos por considerarlos incómodos.

Los viajeros realizan sus trayectos con asco y resignación. La suciedad es menos perceptible dentro de los vagones, aunque el polvo se percibe en toda la red. En los pasillos y andenes de las estaciones se acumulan las basuras. Papeles, colillas, envases y también restos de alimentos forman pequeñas montañas. Los bares y puestos expendedores de alimentos permanecen cerrados desde el jueves. Se han tomado medidas de desratización y desinsectación. Ayer no se vieron más ratas en Quevedo y Tirso de Molina.

A las palabras del alcalde, José María Álvarez del Manzano, contestó el ex alcalde y portavoz del grupo socialista municipal, Juan Barranco: "Los conflictos civiles deben solucionarse entre civiles".

Nicolás Redondo y José María Aznar pidieron ayer una solución inmediata al conflicto de la limpieza. El secretario de UGT acusé a los empresarios del sector de incumplir la ley en lo que respecta a la obligación de negociar de buena fe (Estatuto de los Trabajadores) y les responsabilizó del callejón sin salida en que se encuentra el conflicto. Aznar, presidente del PP, hizo un llamamiento a empresarios y trabajadores para que busquen una solución cuanto antes.

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En la negociación origen del conflicto, los sindicatos bajaron por segunda vez sus reivindicaciones. De las 15.000 pesetas lineales que pedían al principio bajaron a 10.000, y ayer, a 8.500 pesetas, sobre un sueldo bruto de 68.200 pesetas. "No es ninguna oferta nueva", dijo ayer Juan Bosco Arconada, presidente de los empresarios del sector. "No entendemos cómo salen ahora proponiendo esa subida, que equivale a un aumento del 12%, cuando todos los empresarios del sector hemos rechazado la que presentó el inspector de Trabajo, Eduardo Urgorri, que era del 10% (7.000 pesetas lineales)".

Bosco dijo además que la patronal no estaba dispuesta a celebrar más negociaciones hasta que no se revoque la huelga. Los empresarios mantienen su primera oferta de aplicar una subida del 7,4%.

Ayer, CC OO y UGT aceptaron la mediación de Pedro Sabando, consejero de Salud de la Comunidad de Madrid, propuesto el día antes por Joaquín Leguina, presidente del Gobierno regional. Un portavoz de la patronal, sin embargo, también rechazó su mediación.

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