El tratamiento con metadona para los toxicómanos se extiende a todas las cárceles
La dirección general de Instituones Penitenciarias cursó el pasado martes una circular con las instrucciones para generalizar los tratamientos de desintoxicación con metadona en reclusos de 76 centros penitenciarios e toda España. Los protocolos serán controlados por las comuidades autónomas dando preferencia a las adictas embarazadas y drogodependientes de salud muy deteriorada.La Administración da respuesta así a las reiteradas solicitudes por parte de las comuidades autónomas en cuyos -centros penitenciarios ya se llevaba a cabo de forma aislada aIgún tipo de tratamiento con opiáceos sustitutivos.
Entre la población no reclusa, algo más de 2.000 toxicómanos están siendo desintoxicados con metadona en los 40 centros sanitarios autorizados. Una de las razones para extenderlo a las prisiones ha sido la de no interrumpir los protocolos en aquellos reclusos que ya los recibían antes de entrar en la cárcel, siempre que lo puedan acreditar.
Según estadísticas oficiales, el 50% de los internos ha tenido contacto con drogas durante algún momento de su vida y cerca del 30% está considerado como toxicómano declarado.
En presencia del médico
La indicación del inicio, mantenimiento o suspensión de un tratamiento con metadona en las prisiones quedará siempre al criterio de los facultativos de cada centro penitenciario, quienes serán también responsables de la administración de cada dosis en la enfermería.Los reclusos la tomarán en presencia del médico para evitar el riesgo de tráfico con esta sustancia. Por este motivo, la metadona será distribuida-es probable que diariamente- a, través de las unidades responsables de cada autonomía para que las dosis se preparen en el acto y nunca se almacenen.
Aunque las autoridades penitenciarias no consideran que la metadona sea la solución al problema de la drogadicción, se trata de un derivado opiáceo eficaz para suprimir el síndrome de abstinencia provocado por la heroína. De absorción más lenta y menores efectos alucinógenos que la heroína, su principal ventaja es que al administrarse por vía oral, reduce el riesgo de contraer el sida a aquellos heroinómanos que acostumbran a intercambiar jeringuillas.
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