Apostarse en el Auditorio, la mejor forma de conseguir entrada

La puerta principal del Auditorio Nacional era anoche un hervidero de gente que buscaba a quien regalar las entradas que le sobraban. Regalar, que no revender, pues a los espectadores consultados no les costó nada la localidad para el concierto que ofreció anoche la Orquesta Sinfónica de Bilbao.

El recital formaba parte de la serie Nuestras Orquestas, uno de los actos del Madrid 92. La sal estuvo ocupada en un 80%. El Ayuntamiento comunicó hace días que repartiría, a través de las Juntas de Distrito, 473 lo calidades, casi una cuarta parte del aforo del Auditorio Nacional (unas 2.000 personas). Todas fueron repartidas, según la concejalía de Cultura. En la misma puerta, de entre unas veinte de personas consultadas en la media hora previa al concierto, sólo tres señoras de mediana edad aseguraron haber obtenido las localidades en la junta municipal de La Latina. Les sobraba una que intentaban dar a alguien. Curiosamente, sólo una pareja aseguró haber compiado su entrada. Los otros espectadores consultados las consiguieron en sus puestos de trabajo: Comunidad de Madrid, Consorcio Madrid 92, Universidad Carlos III y Universidad Nacional de Educación a Distancia. Otros aseguraban no conocer la procedencia de su entrada: "Me las dio una amiga, pero no sé donde la consiguió". Mientras hablaba, buscaba con la mirada quien podría necesitar tres localidades que tenía de sobra. "Es una pena que no las utilice nadie". Un profesor de Informática de la Universidad Carlos III negaba que por el hecho de tener entradas gratis éstas hubiesen sido cedidas, sin pagar, al centro universitario. Eran las siete y media, hora en que comenzaba el concierto, y esperaba para regalar las localidades sobrantes.

Ya al filo de la hora en se apagasen las luces de la sala y conmenzase el recital, un trabajador del Auditorio también confiaba en regalar sus localidades: "Entre las entradas que se quedan o regalan en el Ayuntamiento, la Comunidad y el Ministerio, se ocupa media sala", afirmaba.