150 marroquíes protestan por la quema de sus chabolas

Unos 150 inmigrantes marroquíes se concentraron ayer en la plaza del Ayuntamiento de Majadahonda para protestar por el incendio de una decena de chabolas a manos de los propietarios de la finca en donde se asentaban desde hace varios años.En las chabolas, situadas en una zona fuera del casco urbano conocida como Casas de Diego, vivían hacinados unos 25 trabajadores que provienen de Alhucemas, en el norte de Marruecos. "Esta acción supone un primer paso para que nuestros derechos sean reconocidos", decían los manifestantes.

"Ni un paso atrás. Inmigrante, adelante", fue el grito más repetido por los marroquíes durante los 60 minutos que duró la concentración. Los inmigrantes, que exigen la mejora de su situación social, quisieron dejar muy claro que "un marroquí no es ni más ni menos que un trabajador. No es ni un ladrón ni un vendedor de droga". En un comunicado leído en la concentración pidieron "el acceso a una vivienda digna y una ley que juzgue los actos racistas". El acto de ayer, apoyado por Izquierda Unida, estuvo organizado por la Asociación de Emigrantes Marroquíes en España (AEME). Su presidente, Riduan Asouik, dijo: "Los marroquíes no estamos acostumbrados a ser protagonistas de nuestra lucha. Debemos hacer valer nuestros derechos y buscar fórmulas para una integración más justa".