Preocupación
Es conveniente que sepa usted, y los lectores de su periódico también, que noticias sobre el funcionamiento de Correos y Telégrafos que han aparecido estos días en la prensa (EL PAÍS del 21 de enero) puede que a las altas jefaturas no les preocupe mucho, pero producen vergüenza y sonrojo en miles de funcionarios de base que trabajamos en esta casa.Hoy, que la paz social reinante, a pesar de muchos atropellos, es escandalosa, los que dirigen este servicio público no nos pue-
den acusar a los funcionarios por huelgas salvajes, ni siquiera domesticadas. Se limitan a matizar que no son galgos, sino podencos; que no son millones de objetos atrasados, sólo cientos de miles.
No pasará nada, cada jefazo seguirá en su puesto. Pero todavía no hay que alarmarse, porque en Correos y Telégrafos hay un equilibrio aún entre la incapacidad demostrada por quienes dirigen y la ilusión y el amor al trabajo bien hecho por muchos miles de funcionarios de base.- Oficial de Correos.
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