Una juez de Nueva York permite a una pareja lesbiana adoptar a un niño

Una juez de Nueva York aprobó el pasado jueves la adopción de un niño de seis años por una pareja lesbiana, formada por la madre natural de la pequeña y la compañera de ésta. La decisión judicial llega en un momento en el que la sociedad norteamericana debate la conveniencia o no de otorgar derechos legales a las familias no convencionales en asuntos como viviendas, seguros médicos y visitas a los hijos. La resolución no es apelable, ya que en este caso no concurren intereses legales enfrentados.La sentencia también sirve de precedente para conseguir derechos de visita en aquellos casos donde la compañera es padre de adopción. El caso implica a una mujer que decidió adoptar al hijo de su compañera, que fue concebido mediante inseminación artificial.

La juez Eva Preminger, que recordó que "no hay ninguna ley en Nueva York que exija que los padres adoptivos sean de un género en concreto", comentó que "el hecho de que las solicitantes en este caso mantengan una relación lésbica pública no es una razón para negar la adopción".

Preminger añadió que "la preocupación por las posibles desventajas de que un niño crezca en una familia formada por personas de un sólo sexo no están confirmadas por la literatura profesional examinada por este tribunal".

Los grupos pro derechos de los homosexuales comentaron que este caso puede ser utilizado en el futuro como un precedente en su lucha por el derecho a la adopción de niños.

Niños afortunados

La juez de Nueva York afirmó que la sentencia concede a la pareja "un reconocimiento legal de su mutuo estatus como padres", a pesar de que no exista un certificado de matrimonio.La juez Eva Preminger señaló: "Hoy día un niño que reciba alimentación apropiada, escolarización adecuada y un hogar protector está entre los afortunados, cualquiera que sea quien se lo proporcione". "Este tribunal se encuentra con un niño que tiene a dos adultos dedicados a su bienestar, seguros de su relación amorosa y determinados a darle lo mejor de sí mismos", añadió.

William Rubenstein, director del Proyecto Nacional de los Derechos de Gays y Lesbianas en la Unión de Libertades Civiles Americana (ACLU), y James Marks, un abogado de la ACLU que representó a la pareja, indicaron que la sentencia es importante porque el tribunal extendió el estatus legal de una familia a una pareja homosexual.

La adopción del niño, identificado en el sumario sólo como Evan, concede a éste importantes derechos legales, explicó la juez. Además establece la obligación de los padres adoptivos de mantener al niño y permite a éste beneficiarse tanto de los seguros médicos como de la seguridad social de sus padres.

Asimismo, establece los derechos de visita a las dos mujeres en caso de que su relación sentimental termine.