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"Los de ETA se pasan matando"

Miles de niños de Vitoria mandan una carta a los terroristas para que abandonen las armas

Pedro Gorospe

"La ETA no me gusta. Son feos", dijo Estíbaliz, de siete años, con su dedo enguantado metido en la boca, tratando de hacerse entender en medio de la barahúnda montada por cientos de niños de su colegio que celebraban ayer, como ella, el Día Escolar de la Paz en Vitoria. Poco después la niña puso su firma -"Estibaliz", sin acento pero con muchas aristas- en uno de los mensajes que los escolares vascos han enviado para que acabe la violencia de los terroristas de ETA.Más de 10.000 escolares firmaron y enviaron ayer tres mensajes dirigidos a ETA, al presidente del Gobierno, Felipe González, y al lehendakari José Antonio Ardanza. "Basta ya. Desconocemos los extraños mecanismos que hacen a algunas personas seguir por el camino del asesinato, del odio y del dolor, pero sí conocemos a quienes sufren y lloran las consecuencias de lo que ustedes hacen", dice la carta dirigida a la organización terrorista, que será remitida a la Koordinadora Abertzale Sozialista (KAS) a través de la sede de Herri Batasuna en Vitoria.

Al igual que estos niños, muchos otros escolares de todo el País Vasco celebraron ayer el Día Internacional de la Paz con sueltas de globos y fiestas de homenaje. Por otro lado, la coordinadora Gesto por la Paz ha convocado una manifestación para el próximo sábado con motivo del aniversario de la muerte de Gandhi, y la Asociación Pro Derechos Humanos puso ayer en marcha una nueva campaña del Ya no me callo, consistente en enviar cartas a HB para que digan a ETA que abandone las armas.

La jornada, cargada de iniclativas a favor del fin de la violencia, comenzó unos minutos antes de las nueve de la mañana cuando unos 30 niños del colegio Samaniego de Vitoria le entregaron tres cartas al alcalde, José Ángel Cuerda, para que encabezara con su firma los mensajes de paz. Todavía con cara de dormidos, escucharon los elogios del alcalde, quien les llamó valientes y pidió que su ejemplo se extendiera por todo el país.

El testigo lo recogieron dos horas después los alumnos del colegio Lasalle de Basurto, en Bilbao. En presencia de Cristina López Benavente, víctima de un atentado con coche bomba el pasado 17 de octubre en Madrid, una estudiante leyó un comunicado a la banda terrorista en el que se les llamaba "lunáticos de mente retorcida que asesinan en nombre de una libertad que ni siquiera conocen". "Miran y apuntan, pero no ven a una persona con derecho a vivir. No oyen los gritos de sus hijos llorando de impotencia y rabia. Hace tiempo que ya no sienten nada. Han perdido su condición de ser humano".

Jorge Gonzalo, de ocho años y cara de empollón, pedía en Vitoria que ETA dejara "libres a todas las personas del mundo". Acababa de salir de clase con deberes de ciencias sociales y se encontró en medio del patio con una pancarta que pedía la paz: "Quiero decirles que se pasan matando, que no tienen que tener envidia de la paz". Era mediodía en la capital alavesa y acababa de comenzar la recogida de firmas contra la violencia.

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Sobre la firma

Pedro Gorospe
Corresponsal en el País Vasco cubre la actualidad política, social y económica. Licenciado en Ciencias de la Información por la UPV-EHU, perteneció a las redacciones de la nueva Gaceta del Norte, Deia, Gaur Express y como productor la televisión pública vasca EITB antes de llegar a EL PAÍS. Es autor del libro El inconformismo de Koldo Saratxaga.

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