Los jefes de la guerrilla regresan hoy a El Salvador para la fiesta de la paz

La comandancia general del Frente Farabundo Martí para la Liberación Nacional (FMLN), que proyecta disolverse para constituirse en directorio político, viajará hoy a El Salvador para estar presente, junto con el presidente Alfredo Cristiani y su Gobierno, en el histórico inicio mañana en la capital del país centroamericano del calendario del cese al fuego, que será conmemorado como fiesta política nacional.

Los preparativos de este acontecimiento, sobre el que ha venido trabajando en los últimos días en un hotel de México la Comisión Nacional para la Consolidación de la Paz (Copaz), organismo nacional encargado de verificar los acuerdos de Nueva York, han sido diseñados conjuntamente por representantes del Gobierno y el FMLN. La ceremonia, que se iniciará hoy con la llegada al país de los cinco comandantes generales y el resto de la comisión negociadora de la extinta guerrilla, tendrán su momento cumbre mañana con un acto solemne en el que participarán todos los partidos políticos representados en la Asamblea Legislativa, que incluirá el juramento de la Copaz sobre la misión que le ha sido confiada.Las actividades continuarán con un acto ecuménico en la plaza de San Salvador del Mundo, al que asistirá la jerarquía eclesiástica de este país centroamericano, y un mitin político seguido de fiesta popular en la plaza Cívica, este último organizado por la oposición y que sellará, con la presencia del mando del FMLN, la integración de la insurgencia en la vida política salvadoreña tras una cruel guerra civil que ha durado 12 años, ha provocado la muerte de 75.000 personas y ha dejado en la bancarrota al país.

Desde que el pasado 16 de enero se firmara solemnemente el fin de la guerra en El Salvador en el castillo de Chapultepec de México, el clima político favorable a la reconciliación no se ha visto alterado y todo indica que la paz ha entrado por la puerta grande de El Salvador.

Este calendario, que se inicia justamente mañana, incluye dos etapas para la separación de fuerzas, que deberán estar acantonadas antes del 2 de marzo: el Ejército en sus cuarteles y el FMLN en 15 puntos controlados por los boinas azules de la ONU.

La reincorporación del FMLN se hará, por otra parte, en cinco fases escalonadas, de manera que el 31 de octubre esté prácticamente reintegrada la insurgencia en la vida civil del país.