"La independencia es el primer paso"

En abril de 1990, Milan Kucan fue elegido presidente de Eslovenia, en las primeras elecciones democráticas de la república que inició el proceso de desintegración de la Federación Yugoslava. Desde entonces, el mandatario esloveno sigue manteniendo el primer puesto en las listas de popularidad.

Liubliana

Pregunta. Usted es el preslidente del primer Estado independiente de los eslovenos. ¿Como se siente?

Respuesta. No hay sentimientos particulares. Es el final de una etapa. El problema de la independencia ha sido formalmente resuelto. Ahora comienzan los problemas relacionados con la vida de la Eslovenia independiente. Nuestro objetivo no es crear una Eslovenia encerrada en sus fronteras: la independencia es el punto de partida y el medio para las futuras integraciones. ¿Cuánto aprovecharemos la nueva situación? Depende de nosotros.

P. El 15 de enero, cuando la mayoría de los países europeos reconocieron a Eslovenia, ustedes no lo celebraron ¿Por qué?.

R. Celebramos el 25 de Junio de 1991, cuando proclamamos la independencia. Desde el 25 de junio hasta el 15 de enero pasamos por un camino difícil, buscando el reconocimiento internacional. Nos esforzamos por convencer a la comunidad internacional de que la situación política en el territorio de la antigua Yugoslavia había cambiado y que las nuevas circunstancias se tenían que tomar en consideración. Por otra parte, la mayoría de la gente sabe que ei reconocimiento en sí no resuelve ningún problema.

P. ¿Teme que la dependencia de Belgrado sea sustituida por la de Viena o Bonn.

R. La dependencia de Belgrado era política. No hay peligro de otra dependencia de tales características. La dependencia económica dependerá de la capacidad de los eslovenos de aceptar la lógica del mercado de la Comunidad Europea, de su habilidad de movilizar las fuerzas para solucionar los problemas del retraso en el desarrollo económico.

Dinero fresco

P. ¿Cuál ha sido el precio de la independencia?

R. Políticamente, el pueblo esloveno ha tomado conciencia de sí mismo. Ésta es la base para el desarrollo más rápido de la sociedad: acercarnos a los estándares europeos, aprender a ser tolerantes, respetar los derechos humanos y de las minorías étnicas. Económicamente hay que recordar que el argumento para el plebiscito sobre la independencia fue la necesidad del desarrollo económico y social de los eslovenos. Vivíamos en una situación de bloqueo económico. Primero padecimos el bloqueo comercial de Serbia; luego, la guerra económica del Gobierno de Ante Markovic [ex primer ministro federal]. Ahora nos espera la reconstrucción fundamental de la economía, sobre todo los cambios en la propiedad y estructurales. Tenemos que adaptarnos a los parámetros internacionales. Para esto necesitamos dinero fresco.

P. ¿Cuánto?

R. Entre 1.000 y 2.000 millones de marcos [Entre 60.000 y 120.000 millones de pesetas]. El precio total del cambio del sistema no ha sido pagado todavía en ninguno de los países ex socialistas. El futuro depende de si los eslovenos sabrán adaptarse y aprovechar los nuevos mecanismos del mercado. Desde el punto de vista psicológico y político, la situación en Eslovenia es ahora distinta: ya no se puede echar la culpa por los fracasos a Belgrado, la guerra y al pasado.

P. ¿Se evitarán losebriflictos sociales?

R. Depende de las habilidades del Gobierno. Grandes energías políticas se han gastado en la búsqueda del reconocimiento internacional. Ahora se libera esta energía. Creo que no habrá grandes revueltas sociales.

P. ¿Usted será candidato para las elecciones presidenciales previstas en primavera o verano de este año?

R. Si continúa la polarización política en Eslovenia creo que pondré mi espalda para ofrecerme como una fuerza integradora.

P. ¿Qué tipo de polarización política?

R. La transformación política en Eslovenla no ha adquirido el perfil pluralista, según los parámetros clásicos: izquierda, derecha, centro. Surgen de nuevo, como antes de la II Guerra Mundial, el bloque clerical y el laico.

P. Hay críticas de que Eslovenia se está convirtiendo en un Estado policía.

R. Todas las democracias del Este, incluida la eslovena, son frágiles. Por eso es necesario luchar por el respeto de los derechos de los ciudadanos. En el Este existe el peligro de la militarización y de la introducción del Estado policial. Eslovenia no es inmune.

P. ¿Cómo se hará la división de bienes de la antigua Yugoslavia?

R. Proponemos la división de las propiedades; en primer lugar, de las divisas, propiedades del Ejército, propiedades federales en el extranjero y en Belgrado. Al mismo tiempo asumimos nuestra responsabilidad con la deuda externa.

P. ¿Eslovenia sufre las consecuencias de la guerra en Croacia.

R. Sí. La guerra está cerca. Mientras no haya paz, Eslovenia no está completamente segura.