Patrimonio de la humanidad

Leo con sorpresa, estupor, ligera indignación y acostumbrado mosqueo en la página 28, sección Cultura, del día 18 de diciembre que la reproducción de la cueva de Altamira lleva un retraso de unos cuatro años. ¿Causa? Un presupuesto de 350 millones de pesetas que no parece ser posible subsanar. Se me ocurre que si a nuestros esforzados dirigentes políticos se les instalara una bañera en sus casas en vez de la polémica piscina y, se les otorgara el privilegio de un par de pesas, a cargo, del erario público faltaría más (seguro que sus domicilios tienen más de 70 metros cuadrados, espacio suficiente para ambas cosas, a mi juicio), podríamos salvar un patrimonio de la humanidad. Quizá lográramos también una mayor asistencia de senadores y diputados. Aunque sea más divertida una raqueta de squash que el estudio de una ponencia.En fin, sacrifiquemos el bienestar social en pro de la máxima latina "Mens sana in corpore sano

Se me plantea una duda. Hoy he visto en primera página de su respetable diario una foto del debate entre senadores sobre los Presupuestos del Estado. ¿Había 12? ¿Seguro? ¿Tantos? Mea culpa. Soy un inútil... Quizá mi última alternativa sea la política.- Juanjo Sánchez