La intensa niebla en Madrid obligó ayer a cancelar más de 140 vuelos en Barajas

El aeropuerto de Barajas se despertó ayer sumergido en un auténtico puré de guisantes. La persistencia de la niebla obligó a las compañías que operan en Madrid a cancelar, hasta la seis de la tarde, 60 vuelos -la mayor parte, de Iberia, que es la compañía con mayor actividad en Barajas- A medianoche, las cancelaciones llegaban a unas 140. Barajas, que desde hace un mes y medio cuenta con un sistema especial que permite actuar en muy deficientes condiciones de visibilidad, registró, hasta media tarde, 250 operaciones.

Los viajeros afectados no tuvieron más remedio que elegir entre el autobús y la espera, lo que produjo tensión entre los pasajeros. El director adjunto del aeropuerto, Fernando Martínez Marcos, describió ayer la situación como "estable, con pequeños altibajos". "Todos estamos tranquilos en el aeropuerto, porque la situación es evidente, la niebla la pueden ver todos los pasajeros", añadió.Según dijo, la mayor parte de las cancelaciones no se deben estrictamente a la imposibilidad técnica motivada por la niebla, sino a la acumulación de retrasos. a causa de los sucesivos enlaces de los vuelos. "Lo normal es que las compañías, ante la demora provocada por las condiciones metereológicas, no quieran tener un avión paralizado en París durante tres horas, por lo que deciden cancelar el vuelo", afirmó.

El dispositivo antiniebla instalado en Madrid el pasado 31 de octubre permite operar en condiciones de categoría 3, las más crudas en cuanto a la visibilidad, siempre que los aviones estén equipados y sus tripulaciones habilitadas técnicamente para trabajar casi a ciegas. Las modernas aeronaves están preparadas, pero la mayor parte de las flotas carece de este sistema.

1.000 metros de visibilidad

Según la dirección de Barajas, la situación estuvo ayer en categoría 3 solamente media hora en todo el día. En algunos momentos, el margen de visibilidad fue de tres kilómetros, aunque a última hora de la tarde, empeoró y llegaba sólo a 1.000 metros.La pista denominada cabecera 33, la única, equipada con el sistema especial de aterrizaje, fue utilizada ayer exclusivamente para los aterrizajes. Para las salidas se utilizaron otras pistas, ya que los despegues pueden realizarse con una visibilidad de sólo 200 metros.

Sin embargo, los datos proporcionados por Aviación Civil no coincidieron con los de la dirección del aeropuerto de Barajas. Según Aviación Civil, hasta las 10 de la mañana la visibilidad era inferior a 200 metros, por lo que el sistema de aterrizaje con niebla no podía ser utilizado. Ningún avión pudo aterrizar o despegar, según este organismo. Después la situación se normalizó.

Según fuentes del aeropuerto, la situación metereológica se mantendrá previsiblemente estable. La falta de viento y las altas presiones han propiciado esta invasión de niebla, cuyo fin no puede pronosticarse por el momento.

[La niebla también afectó a otros medios de transporte, informa Europa Press. La falta de visibilidad provocó nueve accidentes de circulación durante la madrugada de ayer, en los que seis personas resultaron heridas de diversa consideración. Aunque los conductores extremaron Ias precauciones, según la Policía Municipal, algunos chocaron contra objetos fijos, como farolas, semáforos o árboles. El accidente más grave se produjo a las cuatro de la madrugada en la Avenida Cumplutense, donde un coche chocó contra un semáforo. Sus tres ocupantes fueron hospitalizados].

Mientras tanto, el aeropuerto de Barajas se prepara para hacer frente a otros conflictos, esta vez de índole laboral. Las centrales sindicales han convocado una huelga del personal de limpiezas para los próximos días 26, 27 y 28 como medida de presión contra el "alto índice de precarización que sufre este colectivo".