Garzón someterá a Paesa a un careo con la testigo que le acusó de coacción

Baltasar Garzón, titular del juzgado número cinco de instrucción de la Audiencia Nacional, convocó ayer para el próximo viernes un careo entre Francisco Paesa, procesado como presunto colaborador de los GAL (Grupos Antiterroristas de Liberación), y la testigo de este caso a la que supuestamente coaccionó, Blanca Balsategui. Esta decisión persigue esclarecer las contradiciones entre Paesa y Balsategui y se produjo tras la declaración ayer del primero -ante Garzón, con asistencia de representantes de su defensa, de la fiscalía y. de la acusación particular, en la que se le notificó formalmente su procesamiento.El presunto colaborador de los GAL admitió que se entrevistó dos veces a fines de octubre de 1988 con la citada testigo, pero atribuyó este doble encuentro al azar", ya que dijo que no la conocía con anterioridad,y tampoco la ha visto posteriormente.

Paesa rechazó que hubiera coaccionado a Blanca Baltasegui, pero admitió ante Garzón que le hizo ver a aquélla, previamente a que ella declarase ante estejuez, que su testimonio no sería "válido" por entender que estaba fundamentado en las presiones de un abogado de Herri Batasuna y de un periodista, así como en el resentimiento haciasu ex novio, el policía Michel Domínguez, ya condenado en el sumario. de los GAL. "Le dije que le dijera al juez la verdad", explicó Paesa.

También confirmó Paesa que pagó a Balsategui la hab_itación en un hotel madrileño y que respondió como Alberto Seoane cuando, según su versión, la testigo le llamó así, aunque matizó que dos camareros le llamaron por su nombre de pila real en dos ocasiones ante ella. Desmintió haber enviado 50.000 pesetas al domicilio de Baltasegui.

A preguntas de Garzón, y de' la acusación particular, el procesado, que sigue en libertad provisional, negó que se hubiese entrevistado con un ministro del Interior, en contra de lo que afirma Balsategui, ni que conociese a cargo alguno. No obstante, Paesa admitió que tampoco podía garantizar que en alguna comida a la que hubiese asistido años atrás no estuviera presente y le hubiera sido presentado algún alto funcionario de Interior.

El acusado rechazó de plano que hubiese trabajado nunca para el ministerio, del Interior y que se hubiese entrevistado con la citada testigo por indicación de los gal ya condenados, los policías José Amedo y Michel Domínguez, a quienes dijo desconocer. Garzón levantó ayer el secreto sumarial.