El corazón de Oihane cumple un año

El 15 de noviembre de 1990 Oihane nació por segunda vez. Ahora se cumple un año del día en el que la niña navarra recibió un nuevo corazón de cinco centímetros de diámetro y apenas 40 gramos de peso que le convirtió en la trasplantada más joven de España, cuando apenas había cumplido los dos meses y diez días de edad.Oihane vive ahora en el corazón de la sierra navarra de Urbasa, en un pequeño pueblo llamado Baquedano, junto a sus padres, Dioni y Ramón, que han preservado en todo momento la identidad familiar. Su actividad constante, el balbuceo de sus primeras palabras y su buen apetito constituyen la mejor muestra del éxito de aquel trasplante, realizado gracias a la donación del corazón de un bebé muerto a los seis días de nacer en la ciudad de Santa Cruz de Tenerife.

Dioni, la madre de Oihane, afirma que la familia está loca" por la niña. "Hace una vida enteramente normal. No para un momento y, lo que es mejor, no se cansa", manifiesta.

Durante este año, que ha sido su primer año de vida (nació el día 6 de septiembre de 1990), la niña, hija única, ha evolucionado perfectamente. Los doctores que dirigieron la operación del trasplante en la Clínica Universitaria de Navarra, y responsables de su servicio de cirugía cardiovascular, Rafael Llorens y Jesús Herreros han indicado que su desarrollo psicomotor y el crecimiento físico, tanto de talla como de peso, son normales. Tan sólo la necesidad de tomar medicación inmunodepresora para evitar el rechazo de su nuevo órgano, que crece dentro de su pequeño cuerpo, la diferencia de los demás niños. Los controles periódicos a los que se le ha sometido demuestran que su corazón está en perfecto estado.

"No queremos darle más mimos que los normales", asegura Dioni. "Queremos que crezca como otra niña cualquiera y que vaya a la ikastola a estudiar", añade mientras relata que hace poco tiempo Oihane ha visto brotar sus dos primeros dientes. Algún catarro que otro ha asustado a los padres, pero la niña está fuerte, duerme perfectamente y ya chapurrea algunas palabras en euskera, idioma en el que habitualmente se expresa la familia.

Lejos ha quedado el recuerdo del fibroma cardiaco que afectaba al corazón de la niña y que le hubiera causado la muerte de no haber mediado un trasplante, Tres horas de operación sirvieron para injertarle el diminuto corazón de otro bebé que tuvo menos suerte. "Lo que sí quiero decir", subraya Dioni, ,les que la operación de mi hija debe servir para concienciar a la sociedad de la importancia que tienen las donaciones. Pido a la gente mayor solidaridad para posibilitar que otras personas puedan seguir viviendo".

La niña responde "at" (por bad, uno en euskera) cuando se le pregunta la edad y crece en un ambiente rural plenamente saludable. A los padres sólo se les recomendó mantenerla alejada de personas con enfermedades infecciosas y de ambientes contaminados. En Baquedano, el cumpleaños de Oihane que más se celebró fue el de su segundo nacimiento, una madrugada del 15 de noviembre de 1990, cuando la niña comenzó a vivir de nuevo con los latidos de su nuevo corazón.