Dos 'rapados' apuñalaron a un polaco en Alcalá

Miembros del Grupo Judicial del Cuerpo Nacional de Policía de Alcalá de Henares (localidad de 152.000 habitantes) han detenido a dos jóvenes cabezas rapadas, residentes en esa localidad, como presuntos autores de la agresión con arma blanca a un joven polaco de 21 años, al que causaron heridas muy graves. Dos meses antes hubo en Alcalá una pelea entre ciudadanos polacos y cabezas rapadas (skins heads) de la localidad.La agresión, conocida ayer, se produjo el 8 de noviembre cuando el joven polaco, que dice llamarse Mario, estaba en la calle de San Fructuoso, después de salir de un bar.

Según el relato del propio joven, que ayer se encontraba ya recuperado en el hospital Príncipe de Asturias, se le acercaron dos jóvenes cabezas rapadas, comenzaron a golpearle sin mediar palabra y uno de ellos le "pinchó" en tres ocasiones.

Una persona recogió al polaco, que quedó tendido en la calle, y observó cómo dos jóvenes huían, sin poder identificarles. Inmediatamente trasladó al herido a la casa de socorro, desde donde una ambulancia lo llevó al hospital. Allí fue intervenido quirúrgicamente.

Según la policía alcalaína, "si el chico hubiera tardado cinco minutos más en llegar al hospital, ahora estaría muerto".

Las heridas, calificadas de muy graves, le afectan a un pulmón y al hígado, y ha sufrido pérdida de paquete intestinal.

Al no existir testigos de la agresión, agentes del Cuerpo Nacional de Policía comenzaron la búsqueda entre el grupo de cabezas rapadas que existe en Alcalá de Henares.

Finalmente, identificaron y detuvieron el pasado día 12 a P. H. L, de 17 años, y al día siguiente, a J. J. L., también de 17 años, éste como presunto autor material de las puñaladas. J. J. L., según informó la policía, tiene antecedentes policiales por haber participado en peleas como integrante de estos grupos violentos.

Fuentes policiales afirmaron ayer que los jóvenes se habían reconocido autores de la agresión y que "uno de ellos se puso nervioso y pinchó al polaco".

Mario dijo ayer que conocía a uno de sus agresores, ya que un par de meses antes un grupo de ciudadanos polacos, entre los que él se encontraba, se enzarzó en una pelea callejera con los cabezas rapadas, entre los que estaba su agresor. Según Mario, la riña comenzó cuando los skin heads les insultaron y despreciaron por ser extranjeros.

Grupos de jóvenes cabezas rapadas de Alcalá han provocado otras peleas en la ciudad, y ya en otra ocasión "mandaron a otra persona al hospital", según fuentes cercanas al herido. Alguno de estos jóvenes ha recibido tratamiento psicológico en un centro del municipio.

Por otra parte, una mujer, que se identificó como la madre de P. H. L., consultada ayer se limitó a decir que su hijo es tranquilo, aunque explicó que "en casa no cuenta lo que hace en la calle".