Una juez se niega a excarcelar a un toxicómano para que se rehabilite
La negativa de una juez a excarcelar a un enfermo terminal de sida que estaba desintoxicándose en El Patriarca ha puesto de relieve los distintos criterios judiciales que mantienen al respecto los magistrados de la plaza de Castilla.
Se da la circunstancia de que dos jueces de Madrid están conformes con que Francisco Leonés Molina, de 34 años, purgue sus delitos en El Patriarca; sin embargo, un tercero se ha opuesto y ha decidido enviarle a Carabanchel tras condenarle por un robo que cometió en septiembre de 1988.
La madre del toxicómano, Juana Molina, salió llorando el pasado miércoles del Juzgado de Vigilancia Penitenciaria número 1 de Madrid. Acababa de pedirle a la juez Manuela Carmena clemencia para su hijo. Juana Molina intercedió ante Carmena para que su hijo pudiera seguir desintoxicándose en una granja que El Patriarca posee en Francia.
Sobre Francisco pesaba una orden de busca y captura, y fue detenido hace unos días en Madrid tras haberse desplazado desde Francia para participar en las protestas que han mantenido toxicómanos de esa institución frente la plaza de la Villa para exigir al Ayuntamiento más subvenciones para la rehabilitación de drogodependientes.
Garantías de El Patriarca
Dos de los tres jueces madrileños que habían juzgado con anterioridad a Francisco Leonés Molina consintieron en que purgara en El Patriarca, pero el tercero, la juez Araceli Perdices, titular del Jugado de lo Penal número 25, ha rechazado esta posibilidad argumentando que dicha organización no le ofrece garantías como centro de rehabilitación, según han explicado fuentes judiciales de su entorno. Perdices declinó ayer pronunciarse al respecto."Esta juez no tiene nada en contra de que los toxicómanos condenados cumplan sus penas mientras se rehabilitan; de hecho, ha dado permiso a otros muchos para que lo hagan, pero no en El Patriarca", aseguran las citadas fuentes. Y añaden: "Araceli confía más en instituciones como Remar y Proyecto Hombre, de las que recibe mensualmente y sin falta información puntual sobre la evolución de sus internos".
Sobre Francisco han recaído tres sentencias condenatorias por delitos menores. La condena que ahora le ha impuesto la juez Perdices es de dos meses y un día de arresto mayor.
Miguel Fairén, uno de los máximos responsables de El Patriarca en España, admitió ayer, desde la sede que esta institución posee en Valencia, que "existe un cierto colapso" en la oficina que se encarga de enviar a los jueces informes sobre la evolución de 'los internos". "El volumen de papeleo es muy elevado, aunque normalmente hemos enviado las peticiones que nos han hecho los jueces", declaró Fairén. Éste confirmó que Leonés, hasta su reciente detención, estaba rehabilitándose en Rubles (Francia).
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