El lado más oscuro
Los atentados terroristas nos muestran el lado más oscuro, perverso e irracional del ser humano. En estos momentos llego a dudar de la veracidad de todo lo que nos han enseñado sobre la grandeza del hombre. ¿Qué clase de persona que se jacte de pertenecer al género humano es capaz de realizar actos tan aberrantes? Espero que su conciencia les haga sufrir como ellos nos están haciendo sufrir a nosotros. Y si carecen de ella, sólo cabe esperar que el tiempo se encargue de hacer justicia, aunque será demasiado tarde para los cientos de víctimas asesinadas y mutiladas.- Estudiante de tercero de BUP. Ya está bien, señores, ya está bien: me suenan absurdas las palabras diálogo, diplomacia, reivindicaciones, derechos, libertades, etcétera. ¿Qué libertad, si no podemos ir por la calle tranquilos? ¿Qué derecho, si nos quitan el principal, que es el derecho a la vida? Lloro de pena, rabia e impotencia cuando veo las imágenes del telediario, cuando leo los periódicos, y me quedo perpleja al oír, por ejemplo, las manifestaciones de indiferencia del ciudadano de a pie del mismo país vasco, y lo pongo con minúscula si consideramos que son una representación del mismo. ¿Adónde vamos a llegar? Aquí ya nadie se conmueve por nada. No es la gota que colma el vaso, porque el vaso está colmado hace mucho tiempo. No puede haber piedad para los responsables. Sólo pido a Dios que no me toque a mí ni a los míos. Acaben con esto, por favor (ustedes que saben y pueden), acaben con esto de una vez.- Purificación García. Madrid.
La verdad es que no sé ni cómo voy a empezar, y estoy segura de que no servirá para nada lo que voy a escribir, pero por intentarlo no se pierde nada. El jueves cuando vine del instituto y llegué a mi casa, me enteré de los atentados que se habían, producido en Madrid esa mañana. Y el que más impacto e indignación me causó fue el segundo, una mujer que va a trabajar y lleva a su hija al colegio, se montan en su coche y en unos segundos sus vidas cambian por completo. Y es que no puedo explicarme cómo pueden existir en el mundo personas como vosotros, me refiero a los terroristas, que sean capaces de hacer tanto daño a seres inocentes como son los niños, que no tienen culpa de nada. Cuando Irene se entere de que se ha quedado sin piernas al comienzo de la mejor etapa de su vida, la juventud, y que ya nunca más podrá montar en bici, patinar, jugar al baloncesto, bailar... y todo por culpa de vosotros, la verdad es que yo creo, que Irene nunca volverá a ser una niña como otra cualquiera, no sólo fisicamente, sino también psicológicamente, ya que vosotros la habéis marcado para toda su vida. Este año y el que viene creo que serán bastante duros para ella, espero que tenga mucha fuerza para soportar lo que le espera y que no se dé por vencida ni se rinda nunca. Y si creéis que vais a conseguir lo que queréis haciendo cosas como éstas, dejando a gente mutilada y a familias enteras destrozadas, estáis muy equivocados.- María José Cano Hornero. Estudiante de segundo de BUP. Madrid.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.