La guerra de las chabolas

Las excavadoras, escoltadas por la policía, entraron ayer en el poblado marginal de Los Focos, uno de los principales puntos de venta de drogas de Madrid, y derribaron varias decenas de chabolas clandestinas (uno de cuyos momentos recoge la fotografía). Sus moradores, la mayoría gitanos llegados recientemente a Madrid desde otras provincias, las construyeron apresuradamente, atraídos por la posibilidad de que la Administración les diera un piso nuevo. Las chabolas ahora destruidas se han levantado ilegalmente y al ,margen de los criterios de la Administración, empeñada ahora en erradicar los guetos y los problemas de droga que éstos suelen generar. El derribo de infraviviendas no se circunscribe a Los Focos -poblado ubicado entre los distritos de Vicálvaro y San Blas- ni se inició ayer; empezó a ejecutarse hace dos semanas y afectará a todos aquellos núcleos en los que haya chabolas clandestinas.