Solchaga anuncia una nueva ley tributaria que sirva de marco para toda la fiscalidad

El ministro de Economía y, Hacienda, Carlos Solchaga, anunció ayer que su departamento elaborará una nueva Ley General Tributarla, en sustitución de la actual, de 1985. Solchaga, que acompañó ayer al príncipe Felipe; al presidente de la Generalitat, Jordi Pujol, y al alcalde de Barcelona, Pasquall Maragall, en el acto de inauguración del congreso de la Asociación Fiscal Internacional (lFA), dijo que la nueva ley tributarla será "una síntesis; de los avances de nuestro derecho fiscal y norma marco de toda la legislación impositiva".

La modificación de la Ley General Tributaria tiene una gran, trascendencia, ya que supone, entre otras cosas, la. revisión de todo el entramado legal sobre el delito fiscal. Esta ley, no regula ningún impuesto específico, pero define las características de la gestión de los tributos. En esta línea, Hacienda pondrá en marcha a partir de 1992 la Agencia Tributaria, organismo encargada de la gestión de los impuestos.La ley General Tributarla define, asimismo, el sistema de inspección. El fisco estudia desde hace tiempo su. modificación para dar más atribuciones a la Inspección. Hacienda ha elaborado hasta la fecha dos leyes tributarlas, la primera de 1977 cuando se puso en marcha la reforma fiscal impulsada por el entonces ministro de Hacienda, Francisco Fernández Ordóñez, y la actual, de 1985.

Como consecuencia de la subida del Impuesto sobre el valor Añadido (IVA) y el descenso de la presión fiscal sobre las rentas del trabajo previstas a partir de 1992, el titular de Economía dijo que se avecina un próximo panorama fiscal marcado por "un mayor peso de la imposición sobre el consumo, la introducción en nuestro derecho de las futuras disposiciones sobre armonización fiscal que vaya aprobando la CE y la mejora de la gestión tributarla y los procedimientos fiscales para dar mayor eficacia a nuestro sistema tributario.

Reforma realista

El ministro se comprometió ayer a "reformar en esta legislatura el impuesto de sociedades, el asunto de mayor resonancia entre las iniciativas a abordar en lo que queda de esta legislatura". Añadió que su intención es "situar este impuesto en el contexto de las tendencias actuales y dotarlo del máximo realismo a la hora de abordar la tributación del rendimiento empresarial".

Solchaga despejó así las dudas sobre un posible aplazamiento en la reforma de la tributación de las empresas tras la próxima entrada en vigor del nuevo IRPF. El ministro no concretó, sin embargo, la magnitud de los cambios que se introducirán en el actual impuesto de sociedades, que grava con el 35% los beneficios empresariales. Solchagaafirmó que "se revisarán las normas sobre amortizaciones, gastos deducibles, política de provisiones y doble imposición".

La financiación autonómica

Carlos Solchaga expresó también sus dudas respecto a que el nuevo modelo de financiación autonómica pueda incluir el traspaso del Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas (IRPF) a las comunidades autónomas.

Cuando se le preguntó si es factible que un acuerdo sobre financiación autonómica se incluya por la vía de enmiendas en los Presupuestos Generales del Estado recientemente presentados en el Congreso, se limitó a contestar: "Sí, si se llega a un acuerdo antes". Al ser interrogado sobre la posibilidad de que el Estado transfiera a algunas comunidades autónomas la gestión del IRPF, como reclama la Generalitat, el ministro afirmó: "No digo yo que sea fácil, ni que apueste por ello".