Burrell, eliminado en los 200 metros

Leroy Burrell pagó en los cuartos de final de los 200 metros el impuesto de la final de los 100. El velocista estadounidense fue eliminado de manera sorprendente, ante unos rivales que nunca habrían soñado una victoria ante uno de los mejores atletas del mundo. Pero Burrell estaba agotado en todos los aspectos. Por la mañana aún mantenía algunas reservas. Con 20.38 segundos se clasificó para la siguiente ronda. Luego quedó pulverizado."Me ha pesado todo el gasto de las eliminatorias y la Final de 100 metros. Han sido demasiadas carreras y a una gran velocidad. Estaba vacío", dijo después de su eliminación. Su carrera fue un desastre desde el inicio. En la tercera calle, por delante de Linford Christie, se movió como un saco, entre bandazos, con las piernas como postes. Mediada la carrera, una sensación de sorpresa comenzó a adueñarse del estadio. La eliminación de Leroy Burrell era posible. El atleta lo sabía desde el principio. Se negó a cualquier posibilidad de pelea y llegó medio parado. Su registro era la confirmación de su lamentable estado: 21.21 segundos. El español Enrique Talavera lo hizo mejor, con 2 1. 12, a pesar de acabar octavo en su eliminatoria.

Abandono de Joyner

Jackie Joyner también sufrió las consecuencias de su lesión en el penúltimo salto de la prueba de longitud. Ayer, volvió a lesionarse, esta vez de forma definitiva. Fue en los 200 metros, la cuarta especialidad del heptalón. Joyner dominaba sin peligro la prueba. Había vencido en los 100 metros vallas (12.96 segundos) y en el salto de altura (1.91). En el lanzamiento de peso había logrado el segundo puesto, con un tiro de 15.30 metros. Los 200 metros únicamente confirmarían su superioridad en una disciplina que domina con holgura desde hace seis años; pero a la salida de la curva, cayó, sacudida por un tirón en la parte posterior del muslo izquierdo. Su sueño de vencer en longitud y heptalón había quedado roto.

Kenny Harrison salvó la jornada estadounidense. Su victoria en triple salto fue de enorme categoría. Saltó 17,78 metros y en algún nulo se situó por encima de los 18 metros, otra de las fronteras míticas del atletismo. No fue un triunfo fácil, sin embargo. El soviético Voloshin le apretó en cada salto, hasta el punto de quedarse a tan sólo tres centímetros del estadounidense, un saltador chiquito de 1,75 metros, pero dotado de unos tobillos de goma.

Las eliminatorias femeninas de 100 metros dejaron claro el orden que tendrá la final de hoy. La jamaicana Merlene Ottey ganó su serie con 10.89; la alemana Katrin Krabbe hizo 10.91; la estadounidense Gwen Torrencie marcó 10.99. Fueron las únicas que bajaron de 11 segundos.