Los futbolistas denunciaron esta temporada más de 1.200 millones de deudas de sus clubes

Las deudas de los clubes denunciadas esta temporada por sus jugadores superan los 1.200 millones de pesetas. Esta cifra, que casi triplica la de la anterior, 493, se la reparten en casi su totalidad los equipos de la Segunda División A y la B, pues el débito de los de la Primera se reduce a ocho millones. Este aumento es catalogado de "alarmante" por los dirigentes de la Asociación de Futbolistas Españoles (AFE), el sindicato que tramita las denuncias. Los clubes que antes de mañana, 1 de agosto, no salden sus deudas descenderán de categoría, según lo reglamentado.

Los dirigentes del sindicato de los futbolistas no se han recatado en mostrar su preocupación por el progresivo y considerable incremento de estas deudas temporada a temporada. Este aumento repercute decisivamente en la solución del problema, como reconoció Gerardo González Movilla, el presidente de la AFE, quien manifestó: "Estamos encontrando este año más dificultades que en los anteriores para que los jugadores cobren lo que se les debe". González Movilla tiene previsto reunirse hoy, por separado, con representantes de la Federación y de la Liga Profesional para intentar resolver esta cuestión y determinar si algún club tiene que descender de categoría al no pagar su deuda, según establece el reglamento federativo.

La mayor preocupación de los dirigentes de la AFE se centra en una media docena de clubes de la Segunda División B, por sus elevadas deudas, que llegan a representar casi el 80% del total de esa categoría. Son los casos del Ceuta, el Linense, el Granada, el Recreativo de Huelva, el Pontevedra y el Córdoba, cuyas deudas se aproximan a los 300 millones de pesetas. En el Granada han sido 22 jugadores, el total de su plantilla, los que las han denunciado -el club llegó anoche a un acuerdo con varios de ellos- y uno menos en el Linense.

La Segunda B resulta las últimas temporadas una categoría maldita en el capítulo de sus deudas con los jugadores. Este año tampoco es una excepción y más de la mitad de sus equipos, 41 de los 80 que la integran, han sido denunciados.

Menos problemas merecen en la AFE las deudas denunciadas en la Primera al reducirse a las presentadas por dos jugadores y con sólo ocho millones de importe. Se los reparten el Mallorca y el Burgos, denunciados por incumplimiento de contrato por sus ex jugadores Bonet y Ahusín, respectivamente, hace varios años.

La Segunda A es la categoría en la que se han denunciado mayor cifra de deudas. También es la que presenta el número más elevado de reclamaciones en proporción a jugadores. El Málaga, que se jugó el ascenso en la promoción con el Cádiz; el Elche y el Jerez, que han descendido, y el Orihuela se llevan la palma en las denunciadas. En el caso del equipo alicantino son contados los jugadores de su plantilla que no han presentado alguna reclamación.

Descenso de categoría

Los clubes que no paguen sus deudas antes de mañana, 1 de agosto, según los reglamentos federativos, descenderán de categoría. Esta medida fue aprobada por la asamblea del fútbol en la temporada 1985-1986 y aplicada a partir de la siguiente, es decir la 1986-1987. En algunos casos esta medida, el descenso de categoría, no supone que los jugadores cobren lo que les adeuda el club, como sucedió la pasada temporada, por ejemplo, con el Linares, que por ese motivo pasó a jugar en categoría regional.

Para asegurar que los jugadores perciban las cantidades que se les adeuda se constituyó por convenio colectivo un fondo de garantía en la Liga para la Primera y la Segunda A, por importe de 175 millones de pesetas, y otro en la Federación, para la Segunda B, de 50 millones. Pero podrían desaparecer en la próxima temporada, ya que hasta el momento no se ha llegado a un acuerdo para la firma de un nuevo convenio.