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LA NUEVA U.R.S.S.

Tregua con Yeltsin

Pilar Bonet

P. B., Mijaíl Gorbachov dio muestras de haber perdido totalmente el miedo a los conservadores, al rechazar su presión para que condenara abiertamente o tomara iniciativas propias contra el decreto promulgado por Borís Yeltsin, presidente de la Federación Rusa. Éste ha ordenado liquidar las células del partido en las empresas e instituciones en territorio de esta república.

Ayer, Gorbachov se limitó a decir que la decisión de Yeltsin "complica" la difícil situación existente en la sociedad y va en contra de la tendencia al consenso social. Rompiendo con la práctica que el año pasado produjo la "guerra de leyes y decretos entre Rusia y el centro", el líder consideró que el dictamen sobre el decreto corresponde al Tribunal Constitucional.

"Vayan como vayan las cosas, no hay que ser presa del pánico. Nadie tiene derecho a prohibir el trabajo del partido con los colectivos laborales", afirmó Gorbachov, que prometió apoyo moral y material a los funcionarios de las organizaciones de base del PCUS, que sufren personalmente los problemas del cambio.

Gorbachov tuvo que aceptar que el decreto de Yeltsin fuera incluido en el orden del día, a petición de un miembro del comité central, según manifestó uno de los asistentes al pleno. El líder pretendía en un principio que el pleno se limitara a secundar globalmente la declaración del Politburó del PCUS en contra del decreto, señalaron las fuentes.

En una reunión con secretarlos de comités regionales del PCUS celebrada la víspera se había acordado no debatir el decreto en el pleno. En aquella reunión, Gorbachov se negó a promulgar un decreto declarando ilegal el de Borís Yeltsin, según manifestó a esta corresponsal un miembro del Comité Central del PCUS.

Comunicado de condena

Varios miembros del comité central preparaban un comunicado de condena al decreto que debe presentarse hoy al pleno. El texto de este comunicado no había sido difundido ayer entre los asistentes al pleno, pero se esperaba una fórmula parecida a la del comunicado del Politburó, un texto colectivo que Gorbachov asume en tanto que secretario general del PCUS.

El decreto de Yeltsin seguía siendo ayer el principal tema de debate en los medios de comunicación de la URSS. La Comisión Central de Control del PCUS adoptó una resolución para defender los "derechos, el honor y la dignidad de los comunistas". Según la resolución, se ha intensificado una campaña anticomunista.

Por otra parte, el 67% de los soviéticos piensa que el PCUS defiende sobre todo los intereses del aparato del partido, según una encuesta publicada por el semanario Novedades de Moscú.

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Sobre la firma

Pilar Bonet
Es periodista y analista. Durante 34 años fue corresponsal de EL PAÍS en la URSS, Rusia y espacio postsoviético.

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