Encierro rápido de los 'albacerradas'

Los toros del marqués de Albacerrada, ausentes de Pamplona desde el año 1983, realizaron, como es habitual en esta ganadería, un encierro rápido y limpio, sin apenas contusionados.En la relación de pacientes atendidos en los servicios hospitalarios de la capital destacan el californiano Tim Moore, de 22 años de edad, que presentó a su ingreso contusiones en la zona frontal y una herida en la mano izquierda. Kit Crindley, de 62 años, londinense, fue atendido por un traumatismo en el brazo izquierdo y una fractura del cuello del húmero izquierdo.

En el servicio de urgencias del hospital de Navarra fueron atendidos también Francisco Erdozáin Pérez, de 42 años, vecino de la localidad navarra de Berriozar, aquejado de una fractura del tercio inferior del peroné producida cuando corría a la altura de la Telefónica. De igual forma, Rodolfo Lobato Moreno, de 24 años, natural de México, resultó con una herida en el cuero cabelludo y contusiones generalizadas cuando corría en el callejón de la plaza. Ninguno de estos pacientes necesitó ser ingresado en el servicio hospitalario.

El encierro de los albacerradas duró 3,20 minutos, si bien la carrera real fue mucho más rápida, aunque los toros perdieron tiempo al final, quedándose en el redondel de la plaza sin decidirse a entrar en los corrales, aunque sin provocar cogidas. Cinco de los toros abrieron manada durante buena parte del encierro, y sólo uno quedó descolgado.

Según el parte médico facilitado ayer por el servicio de prensa del Gobierno de Navarra, el joven sueco Torlly Urban, cogido gravemente el día 8, abandonó ayer la unidad de cuidados intensivos para pasar a una habitación de planta, dada la evolución favorable. También la súbdita noruega Ann Karin se repone favorablemente de sus heridas tras la cogida sufrida el mismo día 8 en el callejón de la plaza.