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Reportaje:

"El arte depende más de la falsificación que de la originalidad"

Rubén Blades llega a España para comenzar una gira por 14 ciudades en un momento delicado con su madre gravemente enferma en Panamá. "Es una situación que viene de tiempo, y ya hemos asumido el problema, le hemos dado la vuelta, más que nada por la impotencia", dice. "Todo lo hemos hablado y ha demostrado que es una mujer fuerte, artista que canta a través de mí. Cuando acabe esta gira, volveré junto a ella".Después de muchas informaciones contradictorias respecto a su dedicación a la política en perjuicio de la música, Rubén Blades, un panameño que cumplirá 43 años el próximo 16 de julio y que reside en California, se muestra particularmente locuaz cuando se refiere a este tema: "No tengo una fecha concreta para dedicarme a la política. El trabajo de creación de infraestructura es sumamente lento, porque soy un músico, no hay un antecedente y la situación se aprecia desde un punto de vista sensacionalista: 'Salsero va a ser presidente'. En Panamá se esperan en esta década dos momentos claves, en 1994 y en 1998. Son momentos de presentación de planes. No existe ninguna posibilidad de que yo posponga mi compromiso más tarde de estas fechas".

Después de producir un disco a su grupo, Son del Solar, Rubén Blades parece más tranquilo por dejar a sus músicos encarrilados. Y continúa hablando sin parar de sus proyectos políticos: "Tengo muchas ganar de ir a Panamá, pero no quiero llegar en una situación de vulnerabilidad. La presión de ir era muy fuerte por parte de ciertos estamentos, que me querían para salir en la foto. Queremos tratar de ayudar a un país que se ahoga, agobiado por la corrupción, por la ausencia de fondos. Y en áreas donde se pueda ayudar concretamente, no vainas románticas".

Programa

Rubén Blades se muestra optimista porque "hemos llegado a un punto donde las ideas se concretan. No vamos a presentar un sueño ni una abstracción, sino un programa. Unos fundamentos que van a causar un gran revuelo, porque hablamos de una reorganización a nivel urbano. Parte del problema no radica en el fallo de las ideologías, ni en la corrupción, ni en la irresponsabilidad, sino en que estamos intentando resolver problemas del siglo XXI con estructuras del siglo XVII. Es algo lento, pero ya está andando y hay más gente de lo que se cree. No es una cosa de locos". La vocación política de Rubén Blades le ha hecho abandonar parcialmente otra de sus aficiones: el cine. "En los años pasados trabajé bastante en el cine", dice, "pero este año decidí dedicarme a la música. Económicamente el cine es mucho más rentable, pero me saca de la comunidad latina y crea impresiones que no son correctas, como la inaccesibilidad. El cine crea una distancia tremenda y para evitar esto y estar con el grupo, me he ido más con la música".Desde sus comienzos como cantante en 1975, de la mano de Ray Barretto, Rubén Blades se ha mostrado particularmente activo en desarrollar un estilo latino personal. "Fuimos el primer grupo en introducir textos diferentes y en utilizar el sintetizador como base, y esa actitud de provocador ayuda, porque quita telarañas, sacude y avanza. Frente a la producción de pop y de rock, la música afrocubana tenía un formato repetitivo que resultaba cansina para los jóvenes. Estamos tratando de conciliar la necesidad de la incorporación de los nuevos sonidos para mantener la música en un estado competitivo, sin perder nuestras raíces."

Tras la reciente publicación de Caminando, un disco que Blades define como "primo hermano de Siembra", el panameño busca nuevos estímulos para su música y, aunque se muestra reacio a comentar estas novedades, al Final adelanta algo: "Sin perder nunca el tono caribeño, vamos a entrar a un punto medio, a un punto americano en su extensión continental. Estamos hablando de una situación en la que se mezclan diferentes corrientes, incluyendo las corrientes que recibimos del norte".

Esceptico

La gira que Rubén Blades comienza manana en Las Palmas, y que continuará en Santa Cruz de Tenerife, Huelva, León, Madrid, Barcelona, Salamanca, Bilbao, Gijón, Almería, Tarragona, Valencia, Santiago de Compostela y Benidorm, se produce en un momento en el que la música latina vende más discos que nunca, aunque no lanza las campanas al aire: "Yo soy tan escéptico..."Según Blades,"el arte depende más de la falsificación que de la originalidad. Es la repetición de fórmulas que garantizan ciertas lineas comerciales, que pueden ser explotadas a voluntad. Es la creación de estrellas a través de cierto look, de cierto sonido para formar lo rentable. Todo se va creando para una situación que permita la repetición, sin espacio para lo original. Se impide que la música sea, además de un medio de escape, un arte de enfrentamiento capaz de documentar o discutir situaciones que son por lo emocional, universales. Yo todavia siento que nosotros continuamos al margen, porque el formato del grupo continúa siendo rebelde. No tenemos un libreto, la música continúa empujando de frente, con una sección de ritmo que no es una sección creada para satisfacer cualquier sensibilidad. He acostumbrado al grupo a que no mida el éxito en base a que si está lleno el sitio, o si se vendieron tantos discos. Es una estupidez. Venimos a tocar sin condescendencias ni ajustes para aprovechar el momento.".

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