Concentración en el Centro de Extranjeros contra las exposiciones de inmigrantes

Medio centenar de personas, convocadas por diferentes asociaciones de inmigrantes, se concentraron en la tarde de ayer frente al Centro de Internamiento de Extranjeros de Moratalaz para pedir su cierre y el cese de las expulsiones. Desde el domingo, diez internados pendientes de expulsión han sido puestos en libertad. En estos momentos son 30 los extranjeros recluidos en Moratalaz, 10 de ellos en huelga de hambre en protesta por las condiciones del centro.

Durante la concentración, seis letrados de la Asociación Libre de Abogados, encabezados por Fernando Salas, presidente de la Asociación contra la Tortura, intentaron entrar al centro para ver en qué condiciones se encuentran los 30 inmigrantes actualmente internados.Dos horas después del primer intento, los letrados consiguieron entrevistarse con seis internos. "Hay dos con la salud resentida porque se han tomado muy en serio la huelga de hambre y no toman ni zumos ni leche" explicaron. Uno de ellos es Mrimi El Miloud, de nacionalidad marroquí que, según los letrados, "no entiende porqué está encerrado cuando él es un trabajador, eso sí, sin permiso de trabajo".

Representantes de las organizaciones convocantes de la concentración se entrevistarán mañana con el Defensor del Pueblo, Álvaro Gil-Robles, y con miembros del Gabinete de Relaciones con las Cortes del Grupo Socialista en el Congreso para exponerles la situación creada por la Ley de Extranjería. Nueve miembros de estas asociaciones de inmigrantes mantienen un ayuno en el Club de Amigos de la Unesco desde el 31 de mayo en solidaridad con los huelguistas de hambre de Moratalaz.

Arrecian las críticas

Izquierda Unida presentará próximamente una iniciativa parlamentaria solicitando "el cierre del centro de la calle de Tacona porque conculca los derechos humanos fundamentales", según Marisa Castro, del grupo municipal de IU.En los últimos días han arreciado las críticas contra las condiciones del Centro de Mortalaz. UGT, CC OO y el Sindicato Unificado de Policía han denunciado malos tratos, insalubridad y hacinamiento en el centro de Tacona. La Delegación del Gobierno niega las acusaciones de malos tratos y recuerda que los extranjeros son internados por orden judicial.