Winnie Mandela, culpable de secuestro y agresión a cuatro adolescentes

REUTER Winnie Mandela, esposa del máximo dirigente antiapartheid surafricano, Nelson Mandela, y amada por unos y odiada por otros, fue declarada ayer culpable por la justicia de su país de secuestro y complicidad en la agresión de cuatro adolescentes que fueron llevados a su domicilio en Soweto y brutalmente apaleados hace dos años. El mismo tribunal declaró ayer culpable de secuestro a la activista antiapartheid Xoliswa Falati, implicada en el mismo caso junto a Winnie Mandela.

Winnie Mandela, esposa del vicepresidente del Congreso Nacional Africano y considerada como la Madre de la Nación surafricana, debía ayer responder ante el juezjunto a dos militantes anti-apartheid, John Morgan y Xoliswa Falati, de la acusación de secuestro hace dos años de cuatro adolescentes negros.

Según estas acusaciones, los cuatro jóvenes -militantes anti-apartheid- fueron secuestrados con premeditación cuando se hallaban bajo la custodia de un pastor metodista blanco, Paul Verryn, el 29 de diciembre 1988 en un hostal de Soweto por miembros de la guardia privada de Winnie Mandela conocida como el Club de Futbol de la Unión Mandela. Uno de los secuestrados, Strompie Moeketsi, de 14 años, fue hallado muerto en enero de 1989 en un descampado de Soweto. Su asesino, Jerry Richardson fue condenado a muerte el pasado agosto.

Stegmann declaró ante el Tribunal Supremo de Johanesburgo que a pesar de que Winnie Mandela no se hallaba en la casa cuando se produjo el secuestro y los malos tratos, debió enterarse de los hechos más tarde, omisión que la convierte en culpable.

Así como el juez subrayó el "aplomo" y "dignidad" demostrado por Winnie durante sus declaraciones, se mostró en cambio crítico con las respuestas dadas al fiscal por la otra acusada, Falati a la que también declaró culpable de secuestro.

Conspiración

Según dijo el juez, no cabe duda de que los cuatro adolescentes "fueron cogidos contra su voluntad" y así, llevados fuera del hostal. Su veredicto, cuya lectura está previsto continúe hoy, siguió con la afirmación de que Falati y Mandela habían conspirado para secuestrar a los cuatro activistas adolescentes y que Winnie, después, se marchó dejando a Falati y al jefe de su guardia privada, Jerry Richardson y Morgan la misión de perpetrar el delito.

Stegmann dijo también que Falati había intentado engañarle al testificar que Winnie Mandela no tuvo conocimiento del secuestro. "imaginar que ello ocurrió sin el conocimiento de la señora Mandela, es como intentar imaginar a Hamlet sin el Príncipe", dijo el juez.

Frente a él, Winnie Mandela, de 56 años, oía sus palabras sentadada en el banquillo de los acusados. Su marido, Nelson Mandela escuchaba el veredicto sentado en uno de los bancos reservados al público.

A la salida del juicio, Winnie declaró a la prensa su satisfacción ante el reconocimiento por parte del juez de que ella no ha bía intervenido de forma directa en los malos tratos propinados a los niños. El dirigente del ANC, Nelson Mandela, manifestó su "grave alarma" ante ante la posibilidad de que el Gobierno de Pretoria vuelva a imponer el estado de emergencia.