La falta de acuerdo entre Justicia e Interior retrasa la Ley de Seguridad Ciudadana

El Gobierno ha decidido retrasar la aprobación del anteproyecto de Ley de Seguridad Ciudadana para conseguir su "perfección técnica", una vez que los titulares de Interior y Justicia, José Luis Corcuera y Tomás de la Quadra, respectivamente no consiguiesen llegar a un acuerdo final sobre "dos o tres aspectos".Una vez que ayer trascendió la existencia de una reunión el pasado miércoles en La Moncloa presidida por el vicepresidente, Narcís Serra, con los dos ministros citados y con el titular de Relaciones con las Cortes, Virgilio Zapatero, fuentes de la presidencia del Gobierno se han apresurado a asegurar que no existían discrepancias "fundamentales" entre Justicia e Interior. Estas fuentes resaltaron la labor realizada por Interior al haber "depurado el texto legal inicial, asumiendo las observaciones críticas que en su día hizo el Consejo General del Poder Judicial". Estos portavoces aseguran que el tiempo demostrará que "no va a haber desacuerdo entre Corcuera y De la Quadra".

[El secretario de Estado para la Seguridad, Rafael Vera, aseguró ayer que le parece poco probable que el Consejo de Ministros apruebe hoy el anteproyecto de ley "al quedar todavía algunos puntos pendientes, que pueden ser reformados", informa Europa Press].

Los asuntos que han quedado aparcados son los referentes a las entradas en domicilios sin permiso judicial, la conducción a comisaría de quienes no lleven el documento de identidad o se nieguen a identificarse y "la precisión técnica de las infracciones", en referencia a las multas que pueden imponerse a quienes consuman drogas en público.

Lo cierto es que este anteproyecto de ley no está incluido en el orden del día del Consejo de Ministros de hoy, e incluso en medios gubernamentales se apunta la posibilidad de que su aprobación no se produzca hasta después de las elecciones municipales y autonómicas, al objeto de no dar a la oposición nuevas bazas de crítica. Estas fuentes insisten en que el único motivo de retraso es el intento de que la ley no vulnere derechos y libertades, mostrando la seguridad de que el resultado final tendrá el apoyo de todos los miembros del Gobierno.

A este respecto, el portavoz del Grupo Popular, Rodrigo Rato, afirmó ayer que su formación "no apoyará con su voto la pérdida de libertad a cambio de seguridad". Asimismo, el diputado de Izquierda Unida José Luis Núñez afirmó que el anteproyecto que se conoce "tiene lamentables semejanzas con la ley de orden público franquista. Es una ley completamente ineficaz que infringe la Constitución".