Cercanías tendrá prioridad en los planes ferroviarios de los próximos cinco años

El ministro de Obras Públicas y Transportes, José Borrell, explicó ayer ante la Comisión de Industria del Congreso de los Diputados que las cercanías constituirán el eje de la política ferroviaria durante el próximo quinquenio, por encima incluso de la alta velocidad. Además, anunció que es necesario revisar la estructura de tarifas telefónicas para adecuarlas a las existentes en Europa.

Borrell, según informa , hizo un extenso repaso a lo que será la política de su ministerio y explicó las remodelaciones que ha llevado a cabo en la estructura del departamento hasta ahora. Así, señaló que la idea principal es unificar en áreas homogéneas las 22 direcciones generales, los 39 organismos autónomos y las 11 sociedades estatales que se Integraban en los antiguos ministerios. Para ello considera que las tres grandes áreas del nuevo ministerio son las de transportes, comunicaciones e infraestructuras del medio físico, que integraban el medio ambiente, la política hidráulica y el urbanismo y la vivienda.El ministro, que durante su larga intervención no hizo referencias a la política de vivienda, informó de los principales proyectos de su departamento para los próximos meses, que en materia de comunicaciones pasan por la modificación de la Ley General de Ordenación de las Comunicaciones, con la reducción del número de servicios que actualmente están en régimen de monopolio, además de la conclusión del Plan Nacional de Comunicaciones. En cuanto a Correos, insistió en que debe continuar el proceso de transformación de la actual Dirección de Correos en un organismo autónomo de carácter empresarial.

Respecto al ferrocarril, resaltó que las tres grandes prioridades son potenciar las cercanías, los servicios intercities y el transporte combinado de mercancías. Sobre el ancho de vía, resaltó que su ministerio se da un plazo de un año para definir cuál será la estrategia a seguir: si cambiar el ancho de vía o instalar traviesas polivalentes que posibiliten el cambio de ancho.

También habló del tren de alta velocidad y dijo que la construcción de una línea Madrid-Sevilla es una apuesta por el desarrollo económico del Sur. Otro de los puntos principales de su intervención fue el referido a la política de carreteras, para la que pidió la colaboración de todos los grupos por considerar que las inversiones en este terreno son las más necesarias y rentables.

Así, dijo que para desarrollar estas inversiones habrá que tener muy presente que España es un país con una densidad de población muy baja y alejada de los grandes ejes de carreteras de Europa. Las prioridades serán construir la autovía entre Madrid y Valencia.

También anunció que el Gobierno dará a la iniciativa privada la posibilidad de participar en la construcción de los tramos de autopista que consideren rentable, aunque dudó de que esta inversión se produzca.