"He caminado por encima de los muertos"

Alessio Bertrand, de 24 años, el único superviviente hasta el momento del transbordador Moby Prince, que ardió en la noche del miércoles tras chocar con un buque cisterna en el puerto de Livorno, afirmó que había caminado por encima de la gente muerta. En el accidente murieron 140 personas -66 miembros de la tripulación y 74 pasajeros-, la mayoría de ellas asfixiadas mientras presenciaban en la sala de televisión del barco el partido de fútbol que en aquellos momentos disputaban el Barcelona y el Juventus de Turín, en semifinales de la Recopa europea.

"Déjenme sólo. No soy un héroe, estoy vivo de milagro; he caminado por encima de la gente muerta", fueron las primeras palabras Alessio, el único superviviente del transbordador, que permaneció dos horas colgado de una viga hasta que una barca de rescate le pidió que se lanzara al agua. para recogerlo. Inicialmente, se había dicho que Alessio había llegado nadando al puerto de Livorno tras lanzarse desde el barco en llamas.El transbordador Moby Prince se dirigía de Livorno a Cerdeña, y el accidente ocurrió a unos cuatro kilómetros del puerto, hacia las diez de la noche.

Bertrand, que era miembro de la tripulación del transbordador siniestrado, permanecía ayer hospitalizado recuperándose de un fuerte shock. "Estábamos todos en la sala de estar viendo la televisión, como hacíamos cada noche. De pronto, escuché una terrible explosión, que parecía un terremoto. Todos intentamos escapar, pero había humo y fuego por todas partes... Vi gente en el suelo, paralizados, muertos... No sabíamos por donde huir. Dos de mis compañeros murieron en mis brazos. Los mantuve en cubierta durante 15 o 20 minutos, pero no lograron resistir. Les hice la respiración boca a boca, pero estaban muertos. Yo gritaba y nadie me respondía", explica Alessio.

Los últimos minutos

Bertrand señaló que, en el momento de la colisión, retransmitían los últimos minutos del partido de fútbol que se jugaba en

Nou Camp entre el Barcelona y el Juventus de Turín. El tripulante y único superviviente, que repitió varías veces que había visto gente por el suelo "paralizada, muerta", afirmó que los oficiales del buque se encontraban en el puente de mando y dijo desconocer si en esos momentos había niebla, puesto que él no estaba en cubierta en el momento del choque.

Hasta la media tarde de ayer, los equipos de salvamento sólo habían conseguido rescatar un cadáver, correspondiente a un hombre joven, que no había podido ser identificado. Para las 19.00, hora peninsular española, los responsables de la operación anunciaron que todos los desaparecidos habían sido dados por muertos.

La estructura del transbordador, según fuentes de la capitanía del puerto de Livorno, se encuentra casi carbonizada, lo que dificultó la aproximación de los equipos de rescate.

El petrolero Agip Abruzzo, cuyos 36 tripulantes pudieron salvarse, transportaba 82.000 toneladas de crudo. Algunos de los tripulantes de este buque dijeron que el transbordador se cubrió de petróleo por todo el lado donde se produjo el choque y que inmediatamente se prendió en llamas de cuatro metros de altura, creando un terrible muro de fuego del que difícilmente podría escapar nadie.

Salvados en una balsa

Los 36 pasajeros del petrolero se pusieron rápidamente a salvo en una balsa.

Se desconocía anoche la cantidad de petróleo vertida al mar como consecuencia de la colisión, pero fuentes autorizadas subrayaban que -presumiblemente, la cantidad puede ser modesta". Un portavoz de la compañía propietaria del transbordador dijo que, según la lista de pasajeros, todos, los viajeros a bordo eran italianos.

El barco tenía una capacidad para transportar 1.490 personas y 360 automóviles. El accidente ocurrió cuando el MobiI Prince se dirigía a mar abierta, a unos cuatro kilómetros del puerto, en una intensísima niebla, descrita por muchos marineros de la zona como la peor conocida jamás. Un controlador de tráfico marítimo aseguró anoche que no era niebla, sino el humo del incendio del barco.