Irán libera al británico Roger Cooper, acusado de espionaje hace cinco años
Las autoridades de Irán liberaron anteanoche, en medio de la mayor discreción, al hombre de negocios británico Roger Cooper, al que desde hace cinco años detenían bajo acusación de espionaje. La inesperada medida retira un nuevo obstáculo para la normalización de las relaciones entre Londres y Teherán. Cooper, de 55 años, regresó ayer mismo a su país.
"Roger Cooper ha sido liberado y expulsado de Irán el martes por la mañana tras haber concluido su periodo de detención", anunció a primera hora de la tarde Radio Teherán. La emisora citaba como fuente un comunicado "del servicio de relaciones públicas de la Oficina del Poder Judicial". Sin embargo, con la Administración iraní de vacaciones debido a las fiestas de Año Nuevo, que por esta época se celebran en el país, la noticia ha carecido de todo relieve."Tenía el perfil de un espía británico", declaró Cooper al recobrar la libertad para explicar el porqué de su detención y condena. Este hombre de negocios, que habla persa con fluidez, fue detenido en diciembre de 1985 en la frontera entre Irán e Irak. Desde entonces, y bajo la acusación de espionaje, se encontraba detenido sin juicio en la prisión de Evin, en Teherán. Fuentes periodísticas occidentales en la capital iraní señalan la coincidencia de la puesta en libertad del británico con la amnistía parcial pronunciada el pasado dom1ngo por el guía de la República Islámica, Alí Jamenei, con motivo del 121 aniversario de su fundación. De todas formas, la medida se esperaba de forma imprecisa desde el pasado 14 de marzo, cuando el diario Teheran Times, próximo al Gobierno, habló de ella como inminente. La razón para tal previsión se hallaba en la reciente liberación en el Reino Unido de un estudiante iraní, Mehidad Kokabi, de 35 años.
Tres británicos se encuentran secuestrados en Líbano: Terry Walte, John McCarthy y Jack Mann. El secretario del Foreigri Office, Douglas Hurd, reconoció ayer que este asunto "aún no está solucionado" y que la liberación de estos tres rehenes abriría un nuevo capítulo en las relaciones bilaterales.
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