Dura competencia entre las cadenas en EE UU ante la ausencia de un liderazgo

Pocas semanas antes de que estallase la guerra del Golfo, los expertos en el seguimiento de las televisiones en Estados Unidos anticiparon una reducción entre un 10% a un 15% en los presupuestos para esta temporada de 1991-1992, y un total de ventas de 3.700 millones de dólares, frente a los 4.300 millones que se alcanzaron el año pasado. Tras el fin de la guerra se cree que la reducción será menor, aunque en ningún caso se alcanzarán las cifras del año pasado. Los escasos indicios positivos que ya se han advertido en la economía han permitido que el panorama de la televisión norteamericana se vea menos oscuro de lo que se esperaba.

Ante la importancia decisiva de esta temporada, cadenas como la NC y la CBS están tratando de establecer el número de personas que utilizan la televisión (persons using television, PUT) como un criterio que sirva de garantía para atraer a los anunciantes. Por otro lado, las perspectivas ante el posible final de la recesión económica que experimenta el país en general y la industria televisiva en particular aumentan ante la llegada de 1992.Un año que ha sido definido como cuadrienio porque traerá consigo los Juegos Olímpicos y las elecciones presidenciales. La cantidad de dinero que aportarán estos eventos puede ser significativo.

Sin embargo, y a diferencia de otros años, las tres grandes cadenas televisivas (CBS, NBC y ABC) están muy cerca en sus rating de audiencia. Antes había una que marcaba los precios publicitarios en el mercado. Ahora la lucha es más fuerte y la competencia mayor.

La primera vez

Prueba de ello lo cons0tuyen las mediciones de audiencia del pasado mes de febrero realizadas por las dos compañías destacadas en esta materia, como son Nielsen y Arbitrom. Los rastreos (sweeps) que hicieron indicaban que la CBS llegó a encabezar la lista después de la retransmisión de los premios Grammy. Si esta cadena logra mantener su liderazgo se trataría de la primera vez que lo consigue desde febrero de 1985.

La ABC, sin causar sorpresas a nadie, se sitúa en un tercer lugar. No obstante, la diferencia de puntuación entre ellas no es relevante. En este sentido cabe destacar la presencia cada vez más predominante de la cadena Fox, que supo jugar inteligentemente en el momento de las mediciones de audiencia aprovechándose de su baza maestra: los Simpson, unos dibujos animados que se están convirtiendo en otro fenómeno semejante a la popularidad alcanzada por las Tortugas Ninja.

Cantidades desorbitadas

Los Simpson se emitían primero los domingos, pero ante el éxito progresivo fueron trasladados al jueves para competir con el espectáculo de los Cosby. Y lo han logrado hasta el punto de hacer descender el rating de los Cosby de 40 a 20.

Este notable descenso de la famosa serie de los Cosby, ha suscitado otra polémica dentro de la NBC, la cadena que lo emite, que se plantea la duda de pagar o no la desorbitada cantidad que exigen los productores de Cosby para renovar el contrato del espectáculo, una serie que, a pesar de haberse mantenido en cabeza durante más de cinco años, ahora mismo está perdiendo relevancia frente a la aparición de otras telecomedias.

La jugada maestra de Fox con los Simpson no sólo ha acortado las distancias entre las cadenas, sino que ha provocado una avalancha de modas: desde camisetas y ropa con los muñecos, hasta pegatinas, Juegos y un sinfín de productos que han sido bienvenidos para Fox como una sustancial entrada publicitaria.