El hijo de un superviviente de las 'enfermeras asesinas' revela su trato "brutal"
Josef Kohout, hijo de Franz Kohout, paciente de 82 años que sobrevivió a una sobredosis de insulina inyectada en abril de 1988 por dos de las cuatro enfermeras asesinas del hospital Lainz de Viena, describió ayer el trato "brutal" dado por éstas a su padre durante el juicio que se sigue en la capital austriaca contra las cuatro asistentes sanitarias acusadas de asesinar al menos a 42 pacientes. Josef Kohout relató, como ejemplo, que su padre no podía controlar sus esfínteres y que una de las auxiliares sanitarias le gritó: "Viejo, si te haces otra vez en la cama, tendrás problemas".Tras la sobredosis de insulina, Franz Kohout, que no es diabético, sufrió un choque hipoglucémico y entró en estado de coma.
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