El verdadero cáncer
Los accidentes de tráfico son el verdadero cáncer de Europa. Desde que se creé, la Comunidad en 1957, dos millones de ciudadanos han muerto en las carreteras y otros 40 millones han resultado heridos en los 12 países de la CE. Al margen de la desgracia irreparable, el coste econóraico de este desastre, calculado en más de 10 billones de pesetas al año, supera el Producto Interior Bruto de Irlanda, Grecia o Portugal.España registra 635 muertos en la carretera por millón de vehículos, porcentaje sólo superado por Grecia y Portugal. Los muertos son 211 por millón de habitantes, lo que sitúa a España en segunda plaza de los Doce, tras Portugal.
Las medidas de seguridad y control han dado fruto en ciertos países. Así, entre 1975 y 1985, Alemania, Luxemburgo y Holanda redujeron la tasa de accidentes de tráfico entre un 36% y un 46%. El logro en Italia, Francia, Irlanda, Reino Unido, Bélgica, Dinamarca y Portugal fue más modesto, entre un 29% y un 14% de disminución.
Grecia y España siguen la pauta contraria, en parte debido al considerable aumento del parque automovilístico, pero también por culpa del mal estado de las carreteras y de la anarquía de los conductores.
En España, los accidentes han ido en ascenso entre 1970 y 1989, según el estudio de la CE. En la última década, los accidentes de tráfico han crecido un 43%, pero, si se toma en cuenta la curva desde el año 1975, la siniestralidad se ha disparado en un 60%.
Los autemovilistas son las principales víctimas, con un 58,1% del total (el 31,5% de los muertos son conductores y el 26,6% pasajeros). Los cielomotores se cobran el 6,6% del total de fallecidos, y las motos de mayor cilindrada, el 5,5%.
El número de ciclistas atropellados sólo representa el 1,8%, pero los peatones pagan un duro peaje con el 18,4% de los muertos. El resto, un 9,6%, consituye el capítulo de otros.
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