El Supremo ordena readmitir a un guardia civil expulsado por abusar de una joven

La Sala de lo Militar del Tribunal Supremo ha ordenado readmitir a un guardia civil expulsado del cuerpo tras ser condenado a seis meses de prisión por un delito de abusos deshonestos con una joven. El guardia tendrá que ser readmitido "con todos los efectos administrativos y económicos".En 1988, la Audiencia de Pontevedra declaró probado que Manuel Paz invitó a María José Cruces a practicar actos sexuales, a lo que la joven se negó terminantemente. Ante la negativa, Manuel Paz la agarró por el cuello y el pelo y la llevó con amenazas detrás de unos arbustos, "donde la tiró al suelo, manoseándole los pechos y causándole lesiones que tardaron en curar ocho días".

Tras la condena, el ministro de Defensa, Narcís Serra, acordó en septiembre de 1989 imponer a Paz la sanción de separación de servicio. Paz recurrió esta resolución, pero su recurso fue desestimado.

Ahora, la Sala de lo Militar, que preside el magistrado José Jiménez Villarejo, ha sentenciado que existen atentados contra la libertad sexual más graves que los abusos deshonestos, por lo que al guardia civil no debe serle impuesta la sanción disciplinaria más grave.

Al estimar en parte el recurso, la Sala resuelve que las resoluciones del ministro no son conformes a derecho y ha ordenado sustituir la expulsión por una suspensión de empleo durante el tiempo de la pena.